1. Soy mujer, heterosexual, 40 años, con pareja y sin hijos, con estudios superiores. Siempre he tenido mucha curiosidad por el sexo, desde que empecé a leer de adolescente a grandes clásicos eróticos de la biblioteca oculta de mi madre. Quiero pensar que aquello amuebló bien mi cabeza para mi vida sexual adulta.
2. Escribo esta confesión para hablar de mi experiencia como mujer con el sexo anal, ese gran olvidado/desconocido. Mi primera experiencia fue algo frustrante, mi amante había salido muchos años con una chica a la que le encantaba el anal y quería reproducirlo conmigo. Yo accedí, por probar, y él utilizó un bodymilk para lubricarme. Fue un poco un desastre. No lo encontré nada placentero y además me di cuenta de que el chico estaba un poco obsesionado por la pérdida de su antiguo amor. No me pude sentar bien en un par de días, pero tampoco me sentí mal del todo. Me sentía especial por haberme atrevido a probar algo nuevo.
3. He intentado probarlo con otras parejas, pero, al contrario de lo que muchas puedan pensar, a muchos hombres no les atrae hacer sexo anal, y subrayo el verbo hacer. Verlo es otra cosa. Hacerlo es meterse en materia algo… oscura, por decirlo de alguna manera y no les emociona mucho la idea. Además muchos lo asimilan como una experiencia de dominación/violación y no se sienten bien con la idea de practicarlo.
4. No entiendo la polémica porno para hombres, porno para mujeres, pero me gusta ver porno. Veo lo que me apetece, hasta donde me apetece. Investigo y obtengo lo que me gusta. Me gustan los videos porno que contienen sexo anal, entre otros, y los observo con ojo crítico. Apenas se ve que pongan lubricante en la zona antes de la penetración, aunque ahora sé que es necesario, ya que el ano no lubrica de forma natural. Y la saliva, quedará muy morbosa y todo lo que queráis, pero no sirve como lubricante. En algunas películas se aprecia como la chica ya lleva lubricante antes de que la ensaliven. Por supuesto, no sale nada de los preparativos previos. ¿Se ponen las chicas enemas o lavativas antes de hacerlo? Me niego a que el sexo empiece con un procedimiento médico. A aguantarse, que aunque pueda ser algo desagradable es natural como la vida misma.
5. Ahora tengo una pareja que está dispuesta a explorar el tema con cuidado y mucho amor. Utilizamos lubricante específico, por supuesto. Dilatando poco a poco, y siempre parando si me encontraba muy incómoda o no me apetecía seguir. Soy consciente de que las primeras veces no iba a ser muy placentero, (tampoco el coito lo fue al principio) así que me armé de paciencia y observación, viendo cómo se sentía mi cuerpo y mi mente con esta práctica sexual.
6. Un día me pilló relajada y con ganas. Me dio un masaje en la espalda y las nalgas con mucho lubricante, y a continuación me penetró y cuando me quise dar cuenta descubrí que estaba disfrutando, y no sólo mentalmente. Me penetró dándole la espalda, y luego cambiamos a la postura clásica del misionero, pero con penetración anal. ¡¡Y disfruté muchísimo!! Tuve un orgasmo estupendo mientras me acariciaba el clítoris con la mano y me penetraba analmente.
7. Ahora lo puedo decir con conocimiento de causa. El sexo anal puede ser muy placentero, si se hace con cuidado, progresivamente y grandes dosis de respeto y lubricante.
¿Te animas a participar en El Confesionario? Quienes lo han hecho dicen que les ha resultado una experiencia muy enriquecedora. Si te decides, escribe a [email protected] aquello que quieras compartir. Si necesitas más información sobre cómo funciona esta sección entra en “¿Quieres compartir tu historia sexual?”. En la pestaña El Confesionario, encontrarás las entregas anteriores.
Hace unas semanas que he descubierto El Confesionario. Me parece un espacio maravilloso y necesario. Aprendo mucho y me doy cuenta de mis limitaciones y prejuicios a la vez que me afirmo en mis gustos y valoro mis experiencias. Tal vez algún día me decida y comparta. Lo que más me gusta de este espacio es la sección de comentarios… al final se trata de aceptar nuestros gustos y diferencias sin juicios. Me decido a participar hoy porque si bien en otros momentos no he resonado con los comentarios de Pepitogrillo, hoy, la verdad, es que su opinión me ha sorprendido favorablemente. Me he sentido aliviada al leer palabras que describen tan bien mi sentir con relación al sexo anal. Lo he practicado algunas veces, he sentido placer, sí, pero no es lo mio. Lo hice porque “se supone” o es parte del juego… sobre todo el de los hombres. En todas las ocasiones lo hice para complacerlos. De mi no sale. Entonces con la madurez, la libertad y todo lo que viene cuando nos individuamos decidí que no más. No me apetece. Mis razones concuerdan bastante con las de Pepitogrillo. Gracias a todos y todas!
Yo creo que la sociedad ya tenia que salir del tabú del sexo anal, es algo muy placentero como bien dices y se lo recomiendo a todo el mundo pero claro está con mucho cuidado y mucho mimo.
Me encanta ser “babuina”! No me siento rebajada por tener sexo anal, al contrario. Vivo plenamente mi sexualidad como mujer y ser humano que soy.
Realmente Pepitogrillo a veces me pregunto si realmente te das cuenta del vocabulario que usas y de lo ofensivo que puedes ser.
Acepta que no funcionamos igual y que cada uno tiene derecho a vivir su sexualidad de la mejor manera posible.
PD: Sylvia, no sé, pero yo siento que algunos comentarios necesitarían ser moderados …
Siempre me han encantado tus comentarios, la forma en que vives tu sexualidad, debe ser un lujo tenerte como pareja. Te apoyo en todos tus comentarios y noes la primera vez. Yo estoy aprendiendo ahora, aunque un pelin tarde a vivir mi sexualidad con plenitud lo que no significa, que para algunos supongo que supondrá que somos unos salidos y unos raritos, dar rienda suelta a lo que dé la gana. Yo no he vivido la sexualidad con normalidad (sigo odiando esta palabra) pero gracias a muchos de vosotros estoy aprendiendo a vivirla y a quitarme el lastre que ha supuesto mi anterior etapa. Ya sé que es culpa mía y supongo que alguno dirá que par qué tanto rollo pero mi rollo es para apoyarte y porque me encanta transmitirte lo que pienso.
Un beso
multi, que no te guste mi comentario no significa que escriba ofensivamente. Si a ti te gusta el sexo anal, a mi me parece estupendo, pero permite que otros puedan dar su opinión sobre el tema.
Sobre el vocabulario que uso, no sé realmente a qué te refieres; pero como me gusta aprender, te agradeceria me detallases qué es lo que te parece que está mal expresado.
Y sobre la moderación, creo haber expresado claramente a Sylvia que se se siente molesta por mis comentarios, me puede banear; lo entenderé perfectamente porque éste es un foro que ella cuida mucho y no me gustaría ser yo la causa de su malfuncionamiento. Ya sé que puedo herir susceptibilidades; lo hago intencionalmente. Escribir por reir la gracia o por sentirme acogido en un foro no es mi motivación para participar. A mi, por el contrario, me encanta que se me cuestione porque eso me estimula a revisar mis esquemas vitales.
Y por último, me hace mucha gracia el comportamiento que se observa en la mayor parte de los foros cuando en vez de responder a algo que no gusta con ideas se responde con ataques o sintiéndose atacado. Así que si tienes algo que responder a mi comentario, te agradeceré lo hagas sin ningún tipo de limitación.
Estoy de acuerdo con Pepitogrillo.
No entiendo porque se arremete de lo que este en contra de vuestros gustos y orientaciones sexuales.
Sinceramente, no comparemos una relación de sexo oral…a tener que ponerte antes unas lavativas
Documentada aportación sobre el sexo anal que más bien hubiera encajado en un apartado de técnicas amatorias.
Aunque no reniego ni descarto la capacidad erógena de la zona anal ni del punto G, siempre me ha parecido muy elaborada toda la parafernalia relacionada con el sexo anal.
Me llama la atención nuestra enorme capacidad de complicar las cosas, entre ellas, la funcionalidad del nuestro organismo. El ano tiene su funcion igual que la vagina tiene la suya. Médicamente se nos advierte de los riegos del sexo anal, siendo además una práctica sustitutoria que se inició en pasado cuando no existan preservativos. Y ahora, cuando yo no hay limites para hacer el amor por la vía natural sin restricciones, resulta que nos resurge la vena atávica.
Entiendo que sexo anal pueda excitar mucho, igual que el beso negro, pero soy de lo que piensa que debemos dignificar nuestra capacidad amatoria y no rebajarnos al nivel de los babuinos para sentirnos realizados sexualmente.
Una cosa es estimular y juguetear con la zona anal y otra transmutar o permutar los hoyitos.
Pues por la misma regla de tres, tampoco practicaríamos el sexo oral… La boca sólo para hablar y para comer, ¿no?
Creo que lo has entendido todo al revés: los animales son los que practican el sexo sólo para reproducirse, por eso sólo se pueden aparear cuando la hembra está en celo. Las mujeres se diferencian de la mayoría de los animales en que quieren practicar el sexo aunque no estén ovulando, incluso después de la menopausia (otra característica sexual casi exclusiva de la especie humana). ¿Por qué es así? Pues probablemente porque en los humanos el sexo cumple otras funciones aparte de la meramente reproductiva: sirve para mantener la cohesión de la pareja, como descarga del estrés y quién sabe cuántas funciones más. En los humanos lo natural es el sexo recreativo, y como todo juego, cuantas más variaciones tenga, mejor. Por eso, en todas las culturas se ha practicado el sexo oral y el sexo anal, desde tiempos inmemoriales.
Seria bueno que antes de hacer una disertación sobre la diferencia entre mujeres y animales en cuanto al sexo, leyeses con detenimiento lo que pretendes responder., asi te ahorrarías decir algo que es lugar común.
Será por lo que dices que como el sexo en los humanos es recreativo, a algunos les encanta la coprofilia e incluso a otros, con un gusto más exquisito aún , la coprofagia. Pues ala, a disfrutar del sexo.
Perdona si te he entendido mal. Tú dices más arriba:
“soy de lo que piensa que debemos dignificar nuestra capacidad amatoria y no rebajarnos al nivel de los babuinos para sentirnos realizados sexualmente.”
O sea, que crees que el sexo anal no es digno y los que lo practicamos nos rebajamos al nivel de los animales (los babuinos son animales, si no me equivoco). De ahí mi explicación sobre la función de la sexualidad en los humanos. Si no es eso lo que has querido decir, explícate. Y no te vayas por las ramas, que eso sí que es de babuínos 🙂 .
No era esa mi idea pero entiendo que mi comentario pueda dar lugar a otras interpretaciones.
La idea era destacar que, para mi, el sexo anal es una opción rebuscada y primitiva.
Mi punto de vista es que no todo vale en la sexualidad. Una cosa es que uno pueda sentir placer practicando el sexo anal y otra es considerarlo como algo imprescindible en el juego sexual.
Se entiende que el sexo anal sea la unica posibilidad de penetración en las relaciones entre hombres, pero siendo tan rica la respuesta sexual femenina y tantas las posibilidades del cuerpo humano que me parece tirar por la borda no explorar miles de otras opciones más sensibles y naturales.
No entiendo por otra parte que guste una práctica que en sí es insana, ya que necesita preparación, dilatación, lubricación, super higiene, además de que provoca microhemorragias y eventualmente dolor si es continuada.
Pero en fin, dicen que sarna con gusto no pica, ¿verdad? Pues el/la que la disfrute, que lo siga haciendo. No seré yo el que lo impida.
Hola,
Yo soy uno de los que ha experimentado el sexo anal. Y puedo decir que es una delicia. Yo no sé si soy hétero o bisexual, que más da. Me gusta disfrutar del sexo y ya está.
Esta práctica sexual la comparto con mi pareja. Para ello utilizamos un arnés que se coloca ella. Previamente a la penetración, le hago una felación en toda regla y después me hace “tras tras”, casi siempre “a cuatro patas”, que nos da más morbo. Tengo que decir que lo hacemos con la ayuda de un lubricante vaginal que se encarga ella de untarme con sus dedos, como precalentamiento. También utilizamos un preservativo para evitar manchar el aparato.
Desde aquí os recomiendo a todos los hombres que no lo hayan probado que no tengan ni vergüenza ni miedo,y que lo prueben.
A mí no me gusta el sexo anal, para mí es empeñarse a hacer las cosas del revés. Con lo bien que se hace el amor, incluso en las mismas posturas, sin usar lubricantes ni hacer daño ni correr riesgos. Me gusta el orden natural de las cosas y sí, lo he probado y lo he disfrutado alguna vez. Pero no me he sentido igual de cómodo ni liberado, por no hablar de unido a mi pareja.
Gracias por compartir tu experiencia y por hablar del sexo anal.
A mi, me encanta y es con el que tengo mis más fuertes orgasmos. A mis 53 años, hace ya mucho tiempo que no necesito lubricante. El mio natural vaginal es suficiente. Con este untamos mi ano y listo. Realmente, aunque no sea siempre necesario, disfruto mucho de los dos tipos de penetración. Eso si siempre vaginal primero y luego anal.
He conocido hombres tanto heteros como bi, que disfrutan mucho que se les estimule esta zona y otros tantos que no quieren que ni se les toque ahí. La verdad, siempre me he dejado guiar por sus gustos. En cambio, nunca he conocido a algún hombre a quien no le gustara tener sexo anal conmigo.
Es decir, como en todo, creo que no hay que decir algo es necesario (como siempre lubricante) o no lo es. Todos somos distintos y vivimos nuestras experiencias a nuestra manera. Lo esencial es disfrutarlo y no obligar a nadie a hacer lo que no le gusta. Compartir aquí sirve para darnos cuentas de la diversidad de situaciones.
Cada confesonario trae su aporte.
Las incurciones en el sexo anal, tanto para el hombre como para la mujer, no son como las máquinas expendedoras, donde metes la moneda y zas ya tienes el producto.
En el sexo anal como en casi todas las facetas de la sexualidad hay que ir aprendiendo día a día conectando como han comentado por aquí imaginación y acción.
Mi experiencia así me lo dice. La primera vez que trates o tratan de estimularte el punto P, no suele ocurrir “nada”, bueno sí… puede que incluso pierdas ercción.
Con la práctica se puede llegar a encontrar el punto…. de placer, esto vendrá con toda probalidad con la experiencia y…. la conexión entre ámbos. Conseguido ésto…. la erección no decaerá y el placer puede continuar.
Si no gusta.
No gusta.
A pasar página, y por ello no se es ni más ni menos fuerte ni flojo sexualmente. Ni más hetero ni mas homoxesual. Cada uno es como es.
Buen relato y coincido con lo comentado…. por que no se va a experimentar este campo…. si todos y cada uno son placenteros…
Gracias por tu valoración. Experimentar, probar… con conocimiento y respeto, siempre.
A mi me encanta el sexo anal,pero no para todos los días ni para todas las relaciones.Me resulta una práctica muy morbosa y excitante,y personalmente creo que debe haber una excitación previa muy alta.He tenido la fortuna de encontrarme con una chica que alcanzaba el orgasmo facilmente de esa manera,en otros casos si a la chica le ocasiona mucho dolor o le baja la líbido,a mi me ocurre lo mismo.Necesito complicidad e implicación por parte de ella para disfrutarla plenamente.
Muchas gracias por tu comentario, Manu. Complicidad e implicación. ¡Esa es la clave, si señor!
Estoy de acuerdo. El sexo anal puede ser muy estimulante. No he conseguido llegar al orgasmo con esta práctica, pero me excita muchísimo hacerlo y ver cómo es motivo de disfrute para tu amante. Por otro lado, me incluyo en esa preocupación generalizada por la higiene de la zona anal y, por eso, estoy de acuerdo con Hermes en que hay días en los que es mejor no hacerlo. Pero nunca he recurrido a lavativas ni edemas y, la verdad, no creo que lo haga.
Gracias, Dora, por mencionar el orgasmo. Porque una práctica sexual no es menos válida ni valiosa por no terminar en orgasmo. En esto a veces se nos olvida que lo mejor es el viaje, aunque el destino también sea estupendo. Si me excita el sexo anal, y ver como es motivo de disfrute para mi compañero, como muy bien dices, pues eso ya es razón suficiente para incluirlo en nuestros juegos. Y, a veces, el sexo anal no algo para todos los días. De hecho, el no serlo, es parte de su encanto. Que tu pareja te susurre al oído: “hoy te voy a penetrar también por detrás”, puede hacer que te suba la líbido cien puntos.
Ufff, estoy totalmente de acuerdo. Esa confesión susurrada ya me enciende mis motores… 🙂
Dora, yo he visto mujeres tener orgasmos muy fuertes con el sexo anal. El truco consiste en cambiar el ángulo del pene para que roce la pared anterior del recto. De esa manera se consigue estimular el punto G a través de las paredes del recto y la vagina, que son bastante finas. Esto se puede lograr con una penetración anal por delante, aunque tiene menos morbo que hacerlo por detrás en “el perrito”. En esa posición se puede intentar elevar la pelvis del hombre por encima del trasero de la mujer, para penetrarla hacia abajo.
También hay zonas erógenas alrededor del ano (sobre todo dentro en la cara anterior), pero por si solas no bastan para llegar al orgasmo.
Pues habrá que intentarlo de esa forma. Lo cierto es que siempre lo he hecho por detrás, porque la postura en sí me da un morbo… pero por probar que nunca quede. Lo haré y lo comentaré
¡¡¡Gracias Hermes!!! ¡Qué sabio eres!
Quisiera que alguién me orientase en lo siguiente. Soy heterosexual y tengo pareja pero en tres o cuatro ocasiones he intentado introducirme en el ano un estimulador de tamaño normal,concretamente uno que le compre a mi esposa por si le apetecía jugar con él y que lo adquirí en una farmacia y pese a que antes me puse tanto en mi ano como en el vibrador una crema que le dieron ami pareja para la sequedad vaginal, no sentí ningún tipo de estimulación. He de deciros que no lo hice con miedo ni tampoco de forma muy precipitada. El caso es que no sentí absolutamente nada. Es posibleque igual no lo jice correctamente. Espero que esta pregunta no se tome como de mal gusto ya que estas páginas si que son unos auténticos brotes verdes para desarrollar, dentro del respeto, nuestra sexualidad.
Gracias
Gracias por tu comentario, Claro. Los estimuladores anales y los vibradores vaginales no son lo mismo. Los dildos anales tienen una forma diferente: generalmente, son más estrechos en la punta y más anchos en la base, y tiene un tope para que no se puedan colar. Y el material suele ser gelatinoso, blando y firme a la vez. Yo, personalmente, no soy partidaria de la vibración en los dildos anales. Y luego, cada persona es un mundo. Y todas las áreas potencialmente erógenas tienen que estar -de alguna manera- con el órgano sexual más poderoso que tenemos: nuestra imaginación, nuestro cerebro. Si algo “no te pone”, pues no te pone. A otra cosa, mariposa. El efecto “esto me excita” o “me da morbo” tiene que estar presente, o lo que sea que hagas se convierte en algo mecánico y carente de estímulo. Lo uno, sin lo otro, no funciona.
Verás Sexualmente Inquieta, en primer lugar muchas gracias por tu información pero te quisiera comentar algo más y si lo crees conveniente me respondes. Evidentemente no he usado el estimulador adecuado pero también utilice mis dedos y pese a la información recibida de que el masaje prostático excitaba mucho, o bién no lo sé realizar o carezco de estimulación en esa zona. La verdad es que me gustaría probarlo, para que mentir, soy hetero pero eso no implica que pueda y quiera disfrutar de las zonas erógenas de mi cuerpo.
Un beso
Es normal no sentir el placer de próstata las primeras veces; es una sensación que tiene que entrenarse a lo largo de varias sesiones. Poco a poco te vas familiarizando con un tipo de placer muy distinto del que proporciona el pene. La próstata se siente como una especie de bola del tamaño de una nuez en la cara anterior del recto. Aunque se puede alcanzar con los dedos, no resulta cómodo estimularla con ellos durante el tiempo requerido para despertar el placer (como mínimo unos 5 minutos). Hay un dildo específicamente diseñado para estimular la próstata: el Aneros. Tiene una forma curvada que envuelve a la próstata. También se puede usar un dildo o “plug” anal, pero es mejor que tenga la punta ancha para aumentar la presión sobre la próstata – es decir, que tenga una forma más de melón que de cono. Una vez insertado el dildo, se procede a contraer el ano de forma lenta, movimiento que se transmite a través del dildo para masajear la próstata. Hay quien dice haber alcanzado de esa manera un orgasmo anal, de cualidad muy distinta al orgasmo durante la eyaculación.
Espero que esta información te sirva para proseguir tus experimentos.
Lo q leo bien podria haberlo escrito yo. exactam lo mismo pero tengo 41 años y hace mas de 10 q disfruto del sexo anal. Una curiosidad… hay algún hombre al que no le guste? no me tope con ninguno. Es fantástico, no entiendo como en esta epoca y a estas alturas haya gente c tanto perjuicios…en fin, cada uno q haga/experimente y disfrute como quiera. Personalmente me parece genial y lo disfruto muchisimo. Saludos y feliz dia a todas!!!
Un saludo, Ana, y gracias por comentar… En el fondo es bueno que no a todos nos guste lo mismo. A veces, las sensaciones se tienen por contraste, y uno busca y experimenta, hasta dar con la fórmula que más se ajusta. El sexo ofrece tantas posibilidades que la curiosidad y la inquietud deberían de ser una constante en la vida sexual de una persona, si quiere difrutar de una de las actividades más placenteras y con más beneficios (físicos, emocionales, psicológicos) de la vida.
A mi personalmente me encanta.si a mi pareja le gusta y se relaja.
A mi me gusta hacerlo con mucho cuidado y dando total confianza a ella para que este a gusto y no tenga pudor .si se mancha para eso esta el agua y el gel.
El placer que sentimos es muy fuerte y diferente de hacerlo por delante.
Pero hay que ser cariñoso , delicado y prudente para no hacerle daño.
Yo estoy seguro, que si conseguimos que ella disfrute,nuestro placer sera mucho mayor.
Una cosa que ayuda mucho con el sexo anal son los “butt plugs” o dildos anales. Suelen tener forma de pera con una base que impide que desaparezcan en el recto. Los más cómodos son los que están hechos de silicona. Los hay de distintos tamaños, desde la anchura de un dedo hasta auténticas monstruosidades; pero yo no recomendaría nada que exceda la anchura del pene. Se insertan con lubricante, por supuesto, y luego se llevan puestos unos 10 o 15 minutos. Durante ese tiempo hacen que los esfínteres anales se relajen, y así luego la penetración es más fácil y placentera.
El ano se limpia bien con agua y jabón. El uso frecuente del lubricante (incluso fuera del sexo) lo mantiene más limpio y evita lesiones en la frágil mucosa del ano. Lo normal es que el recto esté vacío de heces y que no haga falta un enema, pero algunas personas sí lo necesitan y… bueno, hay días en los que es mejor prescindir del sexo anal. Un enema mal utilizado puede hacer que las cosas sean mucho peor, provocando hasta diarreas. Se debe usar un volumen pequeño de agua que llene sólo el recto, pues si el agua llega al colon descendente provocaría la bajada de heces, que justo es lo que queremos impedir. Es mejor hacer la lavativa de media hora a una hora antes del sexo, para dar un periodo de descanso al recto, que se suele irritar algo. También a veces el agua tarda un tiempo en salir. Es mejor usar agua del grifo templada, no soluciones salinas.
Un último consejo: nunca pasar de la penetración anal a la vaginal sin lavar el pene o cambiar el condón.
Hermes, una recomendación de diez. Gracias por los consejos. Es cierto lo que dices del dildo anal. La relajación es más progresiva y fácil, y luego todo lo demás viene rodado. Además, se convierte en si mismo en un juego no exento de morbo y con muchas posibilidades. Eso, sí, hay que utilizar dildos con tope, para evitar que se cuele y desaparezca en las profundidades oscuras…
Y el último consejo es de cajón, pero nunca está de más recordarlo…
¡¡Gracias, de nuevo!!
El ano es una zona inundada de terminaciones nerviosas y por ende, fuente de mucho placer. incluso si solo practicas contracciones lentas y fuertes, puedes experimentar alguna sensacion no desagradable. Este, al igual que muchos temas y fantasias, sigue medio inmerso en las aguas de los tabues sexuales. Supongo que hombres y mujeres por igual no quieren pasar por una experiencia desagradable o vergonzosa en terminos de higiene en esa zona y es uno de los
temores o reservas generales. Claro que si, las actrices porno se aplican unas lavativas y enemas estrictos antes de filmar. Si el porno que ves es del genero anal predominantemente, encontraras que no solo involucra la penetracion, sino el aplicar segundas lavativas y expulsar asi el liquido tal cual. Como sabras, la via anal en el caso de los hombres, es el principal camino, no el unico, de estimular la prostata, denominado punto P. Muchos hombres no se atreven a practicarlo debido la vinculacion erronea de recibir esto por parte de su pareja heterosexual, como una conducta homosexual. Como te sientes, o que piensas del tema de practicarselo a tu pareja, dada tu aceptacion de la practica y recepcion del sexo anal sobre ti?
Por favor Rafa, no rellenes el campo donde pide web, salvo que conectes tu comentario con una. Puedes dejarlo vacío.
Gracias por tus comentarios, Rafa. He hablado con mi pareja de la idea/fantasía de hacerlo con él. Me parece muy erótico. Si que es cierto que los hombres lo aprecian de forma diferente, aunque no termino de entender qué aporta el pensar que una práctica sexual “es” de una determinada orientación sexual. ¡¡Si lo bueno de esto es que todo vale, si a tí y a tu pareja os apetece!! Sueño con “morder alguna nuca” como mujer, y no pierdo la esperanza…
Jjajjajaj…me encanta esa expresion de ” morder alguna nuca”…
Me gusto la historia, yo soy un chico bisexual y adoro el sexo anal como comienzo del sexo
¿ podrían recomendar algo para el comienzo? estoy con una chica desde hace 11 meses y nos da curiosidad pero como yo empece a experimentar conmigo mismo y sin lubricante no tengo ni idea de como hacerlo para que no resulte molesto en ninguna de las ocasiones.
Por favor, Sylvia, si lo comentas en facebook lo agradeceria porque no suelo abrir esto. Gracias