¿Saboteas tu vida sexual sin saberlo?

El o ella asiste a un taller o a consulta y describe su dificultad/preocupación/inquietud. Lo hace porque sabe que su vida sexual puede mejorar. ¡Lo sabe! Y asegura que anhela, con todas sus fuerzas, sentir más deseo, tener orgasmos, mejorarlos, durar más… ¡lo que sea que le trae al encuentro! Aclaramos conceptos (casi siempre tiene casi todo que ver con falta de información y/o necesidad de obtener permiso para hacer, sentir o ser como se es) y,  aparentemente, ve la luz: “Claro, es eso; lo probaré, hablaré con…” Mil variantes de lo mismo. Pero a la hora de la verdad…¡sabotaje!

Cuando estamos convencidos de que queremos algo -lograrlo, arreglarlo, superarlo- y tenemos el cómo, o por lo menos por dónde comenzar a andar ese camino, y no hacemos nada, ¿qué se esconde detrás?

¿Por qué nos gana la irresponsabilidad, la pereza o actuamos como niños asustados e incluso con doblez?

¿De qué tenemos miedo? ¿A esforzarnos, a no lograrlo a la primera, a ser más felices o quizás a que cumplido el objetivo no resulte tan maravilloso como esperábamos?

Pues…

La intolerancia a la frustración es uno de los grandes males de nuestra época. Los milagros sexuales no existen, pero sí formas de solventar las dificultades, aunque nadie se libra de tener que poner de su parte para llegar al otro lado. Pero, claro, es más cómodo ser cría/o toda la vida y quedarse de brazos cruzados que responsabilizarse.

¿Acaso nos va ir de víctimas y/o culpabilizar? “Ves lo intento, pero no puedo, nadie me comprende, la culpa es suya, no sé, no soy capaz…” ¡Qué fácil! Excusas, hay a patadas. ¿Buscamos que se esconde tras ellas?

¿Obtenemos una ganancia secundaria al no conseguir lo que supuestamente anhelamos? Dicho de otro modo, parece que pierdes por no mover ficha, pero tus beneficios son mayores (o así lo crees, consciente o inconscientemente) que los que obtendrías haciendo lo que podrías hacer. Típico caso: dices que quieres desear, pero no haces nada para recuperar tu deseo. ¿Qué se esconde tras tu inacción? (Y si aún crees que el deseo ha de surgir espontáneo, ¡mal lo tienes!)

Podría seguir, pero ¿para qué?

Tu decides: ¿te quedas igual o creces y te responsabilizas (=te empoderas)?  ¿No lo ves claro? Pues, para milagros ¡te queda Lourdes! Aunque me temo que no funciona.

Para mejorar tu vida sexual has de responsabilizarte. Quejarse y no hacer nada, ir de víctima, sabotearte y/o sabotear a la pareja, ¡no vale! (Respecto a sabotear a la pareja, hablaré en otro post, porque las pequeñas venganzas sexuales dan para comentar.)

A menudo no basta con ser consciente de que tenemos que afrontar una dificultad sexual, incluso no es suficiente saber lo que hay que hacer. Haz memoria, ¿cuántas veces has saboteado tu vida sexual por miedo, por vagancia, por rabia, por… decide tú la razón?

 

4 respuestas a “¿Saboteas tu vida sexual sin saberlo?”

  1. inais dice:

    Me saboteo.Me he saboteado y lo seguiré haciendo. Mea culpa, reconocerlo es el primer paso pero necesito más para vencer la pereza de quererme, respetarme y desearme para después hacerlo con los demás.
    Gracias por recordarmelo.
    No estoy perdiendo tiempo, nunca es tarde.

  2. Eduardo C dice:

    Mi vida sexual es muy satisfactoria,gracias a la biologia que me ha empujado siempre a satisfacer mi anello de dar y recibir.Mis inizios fueros desastrosos pero mi impetu para mejorar me ha llevado a cimas muy altas.Dos divorcios,un aborto,años de asuencia y por fin amarme y cuidarme han constituido el remedio infalible contra mi insatisfaccion y la de pareja de aquel monento.Aaaahhh y respetarme Versus respetar.

  3. Louis Cypher dice:

    El problema es, cómo solventarlo. Tengo prejuicios miedos fobias expectativas altas etctra… Pero eso ya lo se. Lo que no sé es cómo solventarlo.

    Y en efecto se pierde el interés.

    Lo que transmiten algunas chicas, tampoco ayuda.

    Confio en encontrar lo que busco, cómo un día lo hice.
    Pero cierto es que pienso que hasta que llegue estoy perdiendo mucho el tiempo.

    Entonces, cómo se terminan los miedos y prejuicios? Pagando?

  4. Hombre enmascarado dice:

    Pues si, lo reconozco, me auto saboteo y de que manera…, precisamente en pos de mi tranquilidad mental ( aunque suene raro )
    Mentalmente mi forma de ver el sexo esta a años luz de lo que practico conmigo mismo y con mi pareja.
    Llámese represión religiosa, llámese inmadurez, o quizás una conjunción de ambas, lo ignoro la verdad.
    Realmente tus posts dan que pensar y este no lo es menos…
    Gracias por compartirlo

Deja un comentario

Los campos necesarios están marcados