El punto G, siempre en el punto de mira

El punto G provoca alegrías, sorpresas, frustraciones, desengaños, placer, en función de cómo le vaya a cada una de las posibles candidatas a tenerlo… además de llenar páginas de diarios cada equis tiempo. Ha vuelto a ocurrir: hace unos días un ginecólogo estético (manda bemoles) afirmo haberlo “localizado” y, desde entonces, me han llegado bastantes emails y comentarios interesándose por el tema, lo que me obliga a hacerme eco de algo que, sinceramente, me parece una soberana estupidez, pero espero sirva para ayudarnos a cuestionar algunas prácticas e informaciones, además de aclarar la mejor forma de abordar esta cuestión.

La historia es como sigue: un tal Dr. Ostrzenski, del Instituto de Ginecología de St. Petersburg (Florida), disecciona la vagina de una anciana de 83 años y encuentra una pequeña cavidad azulada y en forma de uva que identifica como el punto G, el individuo (y lo escribo con toda su carga despectiva) escribe un artículo en The Journal of Sexual Medicine y, lo peor, consigue que todo el mundo hable de él, logrando la publicidad que busca.

Preguntas y consideraciones por las que, en principio, no me interesó la cuestión:
1ª. ¿Se puede dar credibilidad a un estudio que se basa en una sola disección, realizada, además, en una mujer de la que se desconoce absolutamente todo acerca de su vida sexual? No hace falta ser médico o científico para cuestionarse su validez, ¿no te parece? Es puro sentido común, pero como se suele, decir, es el menos común de los sentidos.
2ª. Algo para mi, fundamental: este tipo tiene un centro de ginecología estética (algo muy de moda en Estados Unidos y que empieza a cuajar-¡desgraciadamente!- en otros países occidentales), es decir, se enriquece a base de rejuvenecer vaginas, embellecer labios vulvares y a engrosar puntos G a base de inyecciones… O sea , a costa de los traumas estéticos femeninos, que él y otros como él, se dedican a fomentar. Lo dejo aquí, pero prometo ocuparme de estas prácticas -muy pocas veces recomendables- en otra ocasión.

Si explico esto es porque considero fundamental que seamos conscientes del origen de ciertas informaciones y lo expuestos que estamos a la manipulación, por culpa de la codicia de ciertos médicos y laboratorios farmacéuticos, y al hambre de noticias sexuales de los medios de comunicación. Para bien o para mal, el sexo vende, ¡si lo sabré yo!

Aclarado esto, me ocupo del tema punto G y, esta vez sí, con toda la seriedad que se merece. Lo primero es lo primero: no existe unanimidad científica en torno a la cuestión. A cada estudio que aparece defendiendo su existencia, le sigue otro que lo niega. De hecho, en un número anterior de la revista médica citada aparecía otro artículo que afirmaba que no existían pruebas consistentes de que el punto G fuera una realidad… y en la prensa, nadie se ocupo de este artículo. Curioso, ¿no te parece?

¿Qué hacemos pues? Ser pragmáticos. Lo de menos es lo que diga tal o cual estudio (insisto: algunos, lo hemos comprobado, de lo más cuestionable), lo importante es como vive su sexualidad cada mujer. Dicho de otro modo, lo crucial es que cada una disfrute de su cuerpo, sin juzgar cómo o de dónde obtiene su placer… Es más, si decide buscar su punto G y encuentra una zona erógena en su vagina que le genera placer, pues perfecto, si no es así, pero goza de su sexualidad, ¿para qué llorar?

Para saber más sobre el punto G y cómo localizarlo, te remito a “Tu sexo es tuyo”. Si deseas ver su índice y/o bajarte la introducción pica en uno de estos enlaces en función de si vives en España o en un país de Hispanoamérica.

28 respuestas a “El punto G, siempre en el punto de mira”

  1. mrf dice:

    No se si existe el punto G o no, y si está en el mismo lugar en cada mujer o si algunas son capaces de sentirlo y otras no, pero yo tengo un lugar dentro de mí, de textura almohadilladita que cada vez que se toca, mi cuerpo reacciona brutalmente. Yo creo que ese es mi punto G.
    🙂

  2. Oro dice:

    Mi punto ”G” lo tengo super localizado en el clítoris.Por lo que soy clitoriana desde que tengo uso de razón.Y cuando mantengo relaciones sexuales le dejo que explore,que investigue,que juegue y busque y,si tarda demasiado…sólo le tengo que dar instrucciones.No tengo pareja y cada hombre es un mundo,igual que cada mujer.

    Gracias Sylvia!!

  3. Dora dice:

    Muy, muy interesante post. Vamos a tener que hacerte un club de fans… jeje.

  4. MonicaHrndz dice:

    Pues para mi el punto G es como el Santo Grial, o la sábana santa… ¿será mito? ¿será verdad? Ironías a parte, me gusta creer que el culmen del acto sexual no está en pulsar un botón o llegar a un punto (sea la letra que sea), sino que se tienen que activar muchos más “sensores” para conseguir el tan ansiado y sobreestimado orgasmo. Además, es como muy místico eso… Y disculpen mi rematada ignorancia en este aspecto pero, el punto G ¿qué es lo que realmente consigue? ¿Un orgasmo instantáneo? ¿muchos? ¿exitación máxima? ¿Alguien que lo haya encontrado puede dar su versión? ¿o este tema es como el de Ricky Martin en “Sorpresa Sorpresa”
    Saluditos a todos/as

    1. Sonmar dice:

      Se consigue un orgasmo con la penetración pero no es instantáneo, hay que estimular. Es potente y profundo, una sensación diferente al orgasmo estimulando solo el clítoris. Pero aun habiéndolo descubierto (o no, igual es q, yo no siempre lo encuentro! eso sí, después de haber alcalzado el clímax estimulando el clítoris, la vagina está mucho más sensitiva y hay más posibilidades de tener otro orgasmo.

      1. Sonmar dice:

        ups! lo he enviado por error sin corregir, quería decir: (o igual no es el punto G, vete tú a saber…)

  5. Javier dice:

    Gracias Sylvia por cuestionar, por desmitificar, por desaprobar, por negar, por afirmar, por poner en tela de juicio… todos aquellos comentarios que salen en revistas, medios de comunicación… porque bien sabes el daño que hacen este y otros muchos tópicos típicos del sexo

  6. Crego de Comesaña dice:

    Pues yo no sé si llego a dar con él, pero mi mujer, aunque parece que le gusta, está deseando que acabe la faena para empezar con la penetración que es lo que le mola de verdad. Lo malo es que no coincidimos mucho y a veces me pasa que eyaculo antes de lo que quisiera.

  7. jota dice:

    yo creo que la gracia está en buscarlo, si está o no está, se le espera o no es otro tema…. si das con él mucho mejor viendo como tu pareja disfruta y tú de verla…

  8. Carmen dice:

    Yo sí tengo un “punto C” (C de Carmen), que a mí me gusta más llamarlo “agujero negro”, en la profundidad de la vagina. Cuando el pene de mi pareja se “enchufa” ahí en un perfecto encaje, no puede permanecer ahí sino a ratos intermitentes, porque una energía (según él parecida a una descarga eléctrica) se le mete por los testículos y lo aspira, haciéndole eyacular.

    1. Crego de Comesaña dice:

      Jo, qué cosa más curiosa. Yo puedo estar todo el tiempo que quiera siempre y cuando no eyacule, cosa que depende del tiempo que lleve sin hacerlo. Lo cual es un problema si ella tiene ganas de marcha y yo llevo cuatro o más días sin eyacular. Y no te digo nada si es por detrás, que a ella le encanta pero que a mí me supone todo el desgaste.

  9. ebeniser dice:

    Yo creo en mi humilde opinión que se da demasiado bombo a algo obvio, el punto G, o como cada uno lo quiera llamar, no esta mas que en la zona que cada chica tenga mas placer, ni mas ni menos, así opino yo, creo que cada chica puede tener un punto g que le de mas placer incluso que el tantas veces buscado, hablado y encontrado en la zona vaginal…
    No entiendo por que hay que darle tantas vueltas a buscar un punto o una zona, cada cual que viva el sexo, las caricias, como mejor le plazca, y cuando encuentres o le estimulen esa zona que le haga flotar, entonces habrá encontrado su verdadero punto G, y dejémonos de estudios, que solo valen para el enriquecimiento personal del que lo realiza, y la confusión del que lo lee…

  10. Juan Carlos dice:

    Este es el punto fantasma… yo lo he buscado y buscado… y nada he encontrado. Y de verdad que esto lo escribo sin cachondeo.

  11. manu-pontevedra dice:

    muchas gracias por estos comentarios tan acertados,al menos de ahora en adelante no me sentiré mal si no doy con el “G” ,jajja.Cuanta desinformación se ha vertido sobre ello y ya ni hablemos de la eyaculación femenina,para llegar a la conclusión que cada cuerpo es único y que lo realmente importante es encontrar el placer sin importar si viene de “aquí o allá”.Ojalá acabemos por borrar ciertos mitos que no ayudan a disfrutar libre y plenamente del sexo.Por cierto…¿es casualidad que casi todos esos mitos sean sobre el placer femenino?Ahí queda eso….

  12. Paseante dice:

    Yo creo que sí existe el punto “G” y que es el único y gran generador de todos los placeres sexuales y muchos otros que surgen como consecuencia de los primeros. Incluso para el hombre. El punto “G” está en el cerebro y se llama “Ganas”, ganas de sexo. Busquen, busquen.

    1. Erosplorer dice:

      Muy bueno. Si señor.

    2. katalluna dice:

      Creo que el punto G de “Ganas” es el mejor funciona. Y si alo Gusta que también va con G, pues este donde este ese es tu punto.

  13. tl dice:

    estoy de acuerdo ,,,,, pero lo divertido es k lo busquen y que lo encuentren ya es increible yo tengo ese hombre k me hizo descubrir que soy multiorgasmicaaaaaaaa muaksssssss

  14. María Maleta Roja dice:

    Sylvia, ¿Qué opinas de la idenficación del Punto G con la uretra esponjosa que rodea la uretra femenina? ¿Y con la explicación de que el punto G es una parte del clítoris interno?

    Es un tema muy recurrente en mis reuniones tapersex… y siempre les digo lo mismo… Qué más da de dónde proceda el placer… Dejense llevar niñas… disfruten de su cuerpo, del de su pareja, de su piel, de su calor (o de su vibración, jejejejeje) … Y si hay un orgasmo, estupendo, y si hay dos mejor que mejor… Eso sí… sigan la regla de “Las mujeres primero” (clítoris, clítoris, clítoris… y luego ya, lo que venga…)…

    Y hablando de clítoris… os dejo aquí la Fábula del Clítoris… que la disfrutéis!!!

    http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=YrX8L1zAaqI

  15. Hola Sylvia.

    Totalmente de acuerdo con tu punto de vista en cuanto al punto G.
    Hay demasiado “médico” con mucho afán de protagonismo por no decir mercantil o comercial.

    Como dicen Maria y Erosplacer dejemoslo donde está, la que lo tiene lo sabe….y seguro que disfruta de él.

    Un saludo y gracias por tus articulos.

    1. Erosplorer dice:

      Hola Buenasvibraciones. Aclarar que mi nick es Erosplorer de explorar el placer tu alternativa suena incluso mejor Erosplacer. Podría ser un buen nick para otra persona. Jejejejeje

  16. Erosplorer dice:

    Totalmente de acuerdo contigo.
    Cuando estudiaba Biología en la Autónoma tuve como profesor al Dr Egozque. Mientras preparaba un seminario de estos que a veces nos dejaban dar a los estudiantes, sobre sexualidad, le pregunté sobre el dichoso punto. Y me contestó lo siguiente: “No se si existe o no, pero es muy divertido buscarlo”.
    Pues eso. Quien quiera que lo busque y, sobre todo que disfrute buscándolo. La Sexualidad está demasiado repleta de santos griales. Dejemos de buscar tanto y disfrutemos de lo que ya hemos encontrado.

  17. Supongo que el estudio de marras ha provocado más curiosidad que aceptación en la comunidad médica, y que los ginecólogos, sexólogos y demás estudiosos serios se estarán riendo del tipo a base de bien.

    En cualquier caso, de algo sí que estoy cien por cien segura, Sylvia: Quien lo tiene, lo sabe 😉

    Un abrazo

  18. Carmen Sanchez Ruano dice:

    Totalmente de acuerdo, Sylvia… mucha fantasía en torno al tema y que añade incertidumbre y desasosiego a la ya vapuleada sexualidad femenina. Lo importante es cómo yo disfruto y qué me gusta… y, en todo caso, estaría por el punto C (de clítoris)… sin duda
    Por cierto, ¿no fue Ernst Gräfenberg (de ahí punto G), ginecólogo alemán, el primero que lo describió, estudiándo la eyaculación femenina?…

    1. sylvia dice:

      Sí,¡… “fue descubierto por el ginecólogo alemán Ernst Gräfenberg (de ahí que se llame G) a principios de la década de los cincuenta, y cayó en el olvido hasta que, en 1982, tres investigadores estadounidenses—Beverly Whipple (de la que ya hemos hablado), John D. Perry y Alice Khan Ladas— redescubrieron esta zona vaginal, sin imaginar la polémica que iba a suscitar su hallazgo: que si existía, que si no, que si sólo lo tenían algunas mujeres, que si su nombre era incorrecto…” (texto de “Tu sexo es tuyo”)

  19. Desmitificando y tocando con los pies en el suelo. Gracias Sylvia!

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