(Hoy nos escribe Fatima Magro, nuestra Fati. Es trabajadora social, experta en educación sexual y especialista en violencia doméstica. Como hay muchos padres entre nosotros y muchas peticiones sobre cómo educar a los hijos en sexualidad, quién mejor que ella para darnos algunos buenos consejos.)
Cuando tenía 7 añitos, había en mi pueblo un burdel llamado “Play Lady” y un día, al pasar por ahí con el coche, le pregunté a mi padre (y son palabras textuales): “Papá, el Play Lady ¿es un sitio donde las mujeres van a jugar al parchís y al escondite?” (tenía mi razón: ¿acaso no indica eso el nombre del local?). El pobre no sabía dónde meterse, ni qué responder… ¿Os suena?
Es probable, porque respecto al sexo, como mucho, la mayoría hemos oído eso de “Ten cuidado”, es decir, hemos recibido de nuestros progenitores, que por supuesto quieren lo mejor para sus hijos, más consejos encaminados hacia los peligros que hacia los beneficios del placer erótico. Lógico: ellos han recibido todavía menos educación sexual que nosotros.
Cuando he impartido charlas con padres y madres (no es fácil lidiar con ellos), he trabajado el siguiente objetivo: que nuestros hijos aprendan a conocerse, aceptarse y a expresar su erótica de modo que resulte satisfactoria. Unas notas:
Hasta los 3 años: Desde que nacen les educamos con caricias, abrazos, y muestras de afecto. A partir de ese momento debemos de cuidar la igualdad entre los sexos y sobretodo que el papel de la familia no ha de ser el mismo que el de un profesional o una enciclopedia. Lo que hay que garantizar no es que tu hijo aprenda todo lo que le cuentas, lo realmente importante desde el principio es que aprendan que cuentan contigo.
De 3 a 6 años aproximadamente: se disparan las alarmas cuando tu hijo/ a se “toca”. El tocamiento ni acarrea consecuencias futuras ni alteran el desarrollo. Esa conducta significa explorarse, conocerse y procurarse sensaciones agradables. No se trata de estar a favor o en contra, si es bueno o malo, sino de valorar si la conducta se presenta de forma adecuada o inadecuada (por ejemplo, hacerlo compulsivamente). Recomiendo consultar este pdf: “La educación sexual de la primera infancia”, de Graciela Hernández Morales y Concepción Jaramillo Guijarro, 2003.
De 6 a 12 años aproximadamente: la educación sexual adquiere una dimensión más auténtica, pues nuestros hijos han interiorizado la “moral” más o menos dominante del mundo adulto. Se les aconseja: contemplar las diferentes sexualidades; crear una atmósfera positiva, respetar la intimidad, hablar de nosotros y nuestra sexualidad, no transmitir prejuicios, no hablar solo de problemas; y seguir vigilando los roles de género. En este caso, podéis consultar este pdf: “La educación sexual de niños y niñas de 6 a 12 años”, de las mismas autoras (2006).
A partir de la adolescencia: los padres y madres pasaremos a un segundo plano compartiendo protagonismo con la pandilla. Seguir haciendo hincapié en que pueden contar con nosotros, ante todo. Hablarles de recursos de educación sexual, de métodos anticonceptivos, pero también, de los beneficios del sexo. ¿Conocéis la serie”Modern Family”? Pues el capítulo 13 de la temporada 2 trata sobre este tema de forma muy divertida, os lo recomiendo.
También os recomiendo leer “La educación sexual de los hijos”, de Félix López Sánchez, un libro completísimo que da un repaso magistral a todo el tema en cuestión.
Nota de Sylvia:
Libros para niños:
Primeras lecturas (aunque no lean, para eso están los papis). Uno de los mejores es “¿De dónde venimos?” y es de Peter Mayle (editorial Maeva). Si entráis en este enlace veréis la primera de las cuatro partes de un vídeo educativo que se basa en el libro.
A partir de los 4 años, hay una autora que es altamente recomendable por su trabajo en educación sexual. Se trata de Robbie H. Harris, que trabaja en equipo con el ilustrador Michael Emberley. Juntos logran hacer libros deliciosos para críos. El primero que os recomiendo, para niños de 4 en adelante: “No es la cigüeña”, de Robbie H. Harris. Temas: qué hace que una niña sea una niña, que un niño sea un niño, el origen de los bebés… A partir de 7 años, mejor optar por “¡Es alucinante!” Su subtítulo ya lo dice todo: “Un libro que habla sobre óvulos, espermatozoides, nacimientos, bebes y familias”. A partir de 10 años o cuando empiezan los cambios: “Sexo… ¿qué es eso?” donde aborda el desarrollo, los cambios corporales que se experimentan durante la adolescencia, sexo (incluida la masturbación) y la salud sexual (habla del SIDA, por ejemplo).
Para preadolescentes y adolescentes: Además del libro de Robbie H. Harris al que ya me he referido, si tienes una niña, te puede interesar “El libro de la regla” de Karen Gravelle. Incluye como indica su subtítulo “todo lo que temen preguntar pero tienen que saber” con dibujos muy simpáticos.
La profesora de educación sexual Lynda Madaras se ha especializado en chavales entre 10 y 15 años: “¿Qué me está pasando? (Libro para chicas)” y “¿Qué me está pasando?” (Libro para chicos)”. Como indican los títulos están escritos pensando en el sexo de quien los lee, así la autora puede hacer hincapié en determinados aspectos que puedan interesarles más. En las chicas, por ejemplo, los tampones, la depilación, la dieta, el ciclo menstrual… En los chicos, afeitarse, el deporte, la forma del pene, las erecciones espontáneas… En ambos casos aborda casi todos los temas que pueden interesar y preocupar: cambios físicos, órganos reproductores, ciclo menstrual, orientación sexual, enamorarse, el deseo sexual… Sin embargo, a pesar de hablar de métodos anticonceptivos, abusos e infecciones de transmisión sexual, no aborda claramente la primera vez. Ambos incluyen una introducción para los padres.
Por último, dos trabajos muy buenos son:
“El diario rojo de Carlota”, de Gemma Lienas, y “El diario rojo de Flanagan”, de Andreu Martín. En el primero, Carlota nos explica sus primeras relaciones sentimentales y sexuales, a la vez que va anotando todo lo que aprende acerca de los genitales, la respuesta sexual, el primer coito, los métodos anticonceptivos, el embarazo, la homosexualidad, las infecciones de transmisión sexual,… En el segundo, Flanagan hace lo propio contándoselo a los chicos. En realidad, son manuales de sexo explicados en forma de diario y con historias de por medio. Suelen gustar mucho a sus lectores.
Existen dos producciones excelentes sobre los cambios que que niños y niñas experimentan al llegar a la pubertad. La primera es una serie de animación basada en el libro “¿Qué me está pasando?”, de Peter Mayle (el mismo de “¿De dónde venimos?). Para verla, clica aquí. La segunda es el capítulo dedicado a la adolescencia de la serie documental “El cuerpo humano”, producida por la BBC.
gracias Sylvia. Lo haré
jo..
Llego muy tarde a este post pero necesito un poco de ayuda.
Mi hijo el mayor,9años..parece que me come con la mirada si me pongo un escote..busca mis labios al darme besos y no deja de manosearme en cuanto puede.
Ya le he dicho que me molesta y yo, le sigo atusando como al pequeño,abrazándole y dándole los mismos mimos pero me siento incómoda si hace eso; no me molesta que se ría con el hermano pequeño si me ven desnuda, les hace gracia pero no quiere ni oir hablar ni en bromas de novias, de chicas,de niñas que le puedan gustar o al revés.
Un día le dió un tortazo a un amigo porque insistia en bromear con él sobre el tema(y no es nada agresivo); ya le he dicho varias veces que yo no puedo ser su novia ni casarme con él, porque en su imaginación yo soy la única;habla y juega con normalidad con niñas y primas pero me incomoda ya incluso, dormir con él, alguna vez que lo pide.
Me dá un poco de miedo que esté asumiendo un rol equivocado o una idea sexual errónea.Hablamos del cuerpo con normalidad.(madre separada)
Échale un vistazo al pdf que se recomienda en el post sobre cómo educar a niños de su edad porque encontrarás mucha información útil. Y en plan cortito. explócale tranquilamente que no quieres que te bese y toque en plan “novios”, porque eres su mamá.Eso es lo que has de dejarle claro, es decir, que no hay nada de malo en esas cosas, pero que se hacen con las novias, no cn mami. Importante evitar que se sienta culpable por ello o piense que lo sensual es malo.
Y si no quiere o le da vergüenza hablar de chicas no le empujes. Puedes comentar cosas sin hacerle preguntas directamente, es decir, aprovechar situaciones, escenas de películas, anuncios, historias de otras personas para hablarle de lo que conseideres importante. También podría regalarle alguno de los libros recomendados (son muy buenos).
¿Qué decirle a un niño de 7 años que ha dibujado un hombre con el pene al descubierto que dice “estoy preparado para follar. ¡Ha a a aa a !!”?
Me encanta saber que la mentalidad está cambiando. Yo no tengo hijos pero si algún día soy madre hablaré con ellos sobre sexo de la manera más natural posible.
Por desgracia mis padres nunca me han hablado de ello y crecí pensando que las mujeres que querían tener niños tenían que comer mucho para “echar barriga y engordar”… y esto fue así hasta que tuve mi primera regla con doce años. Mi madre me prohibía comer helados y lavarme la cabeza… Y así podría enumerar un sinfín de comentarios que me acompañaron durante mi adolescencia. Cuando lo pienso no puedo evitar decir para mis adentros: qué lastima!! Con lo fácil que hubiera sido decir la verdad. Y todavía hoy cuando se lo echo en cara a mi madre no es capaz de abordar el tema.
¡Excelente tema y me viene justo a tiempo!
En mi casa está creciendo un hombrecito y como hermana mayor me siento responsable de su educación, también de la sexual. Tiene diez años y cada vez va cobrando más conciencia del mundo que le rodea y haciendo más preguntas. ¡Seguro que con todos estos enlaces consigo prepararme para contestarlas!
Personalmente tuve mucha suerte, mi madre siempre ha abordado el tema con naturalidad y me ha proporcionado mucha literatura a lo largo de mi vida, simpre acorde a mi edad.
Recuerdo un libro en concreto que me parece de lo más apropiado para adolescentes, incluso para aquellos a los que les parezca que ya son demasiado mayores para “LEER sobre sexo”. Es la “Dee Snider’s Teenage Survival Guide”. Yo la leí en ruso y no sé si estará traducida al castellano.
No es solamente una guía sobre desarrollo psíquico, físico y sexual de un adolescente, aborda todo tipo de temas. Curiosamente está escrito por alguien que a muy pocos padres les puede parecer una persona apropiada para aconsejar a sus hijos, por el cantante del grupo Glam Metal “Twisted Sister”, Dee Snider.
No había leído este post.
Quería aportar un enlace en el que se puede descargar una guía titulada “no hay lugar como el hogar para la educación sexual” que a mi me ha ayudado mucho.
Y como anécdota decir que cuando mi hijo pequeño hizo la gran pregunta, que no es por donde salen los niños, sino por donde entran…. me sometí voluntariamente a un interrogatorio de 3 horas que me hicieron entre los dos (mi niña y mi niño, de aquella tenían 6 años ella y 3 años el). Y una vez que cerré el capítulo, les escucho en su habitación: ¡¡¡oye….. ¿y si probamos tu y y???!!! en fin… creo que lo importante, con diferencia es transmitir, sobre todas las cosas que es un tema del que se puede hablar. Mejor o peor, pero que no es un tabú.
Bueno, este tema me encanta.
Yo tengo dos muchachitos de 5 y 7 recién cumplidos, y el mayor siempre ha sido muy precoz en éstos temas. Ya hace un año tuve que explicarle lo que era la menstruación y que mamá llevaba un DIU (porque estaba emperrado en tener un hermanito).
Desde los 3 que le vengo diciendo que tocarse está muy bien, pero que tiene que hacerlo en la intimidad, y especialmente NO delante de su madre o en la calle. Y ambos lo hacen cuando se acuestan.
Pero lo bueno fué no hace mucho, un día que me pregunta:
niño: mamá, ¿como se hacen los niños?
yo: le expliqué un poco lo de los óvulos y los espermatozoides (semen)
niño: y de donde sale el semen?
yo: del pene cariño
niño: ah….y entonces, si alguien se come el semen le crece el cuello??? (inocencia total) jajaja
yo: no, solo se hacen niños si se introduce en la mujer para que vaya hacia los óvulos por la vagina.
niño: ¿y como se saca?
yo: (cara de y ahora como salgo de ésta??? porque en mi mente me salía solo frotando y pensaba en Mr. Proper y lo del frotar se va a acabar), finalmente le dije exactamente eso, frotando, sea con la mano, o con la vulva, o con lo que sea. Pero que no era el momento de probarlo porque era todavía muy pequeño y no funcionaría, a parte que tener niños a su edad no era lo más recomendable….
cuando él seguía con el tema, le paré diciendo que por ahora tenia ya información más que suficiente y que seguiríamos hablando cuando tuviera pelo en el sobaco, que es cuando la información empezaría a ser relevante, lo tengo desde entonces alucinado con la idea que le va a salir pelo!!
El caso es que intentar dar una explicación natural del sexo a los niños es algo muy necesario para que de mayores puedan preguntarte sin reparos. Yo tuve la suerte que mi padre me explicó todo lo que tenía que saber hacia los 10 años (existencia y utilidad del clítoris incluída), puesto que yo era tan o más curiosa que mi hijo y le machaque a preguntas, eso hizo que siempre he visto el sexo como algo natural, y además he estado suficientemente informada para no cometer locuras ni estupideces. Eso sí, ahora se, lo complicado que es cuando llega el momento….
Blancaneus. Gracias por comentar este post que tanto tiempo lleva por aquí. Es bonito saber que aún perdura y le hace reflexionar a las lectoras y los lectores. Eso sí, me han faltado experiencias y opiniones de papás. ¿Será por la conciliación (muy escasa para ellos) o porque les da más reparo compartir?
Qué bonito saber que has hablado con tus hijos a pesar de no haberles crecido el pelo en el sobaco! Eso es lo que he querido transmitir. Aunque cree tensiones a madres y padres, aunque no sepas qué contestar, es vital, básico y bueno que ellos sepan que cuentan contigo. Enhorabuena por esa naturalidad que les has transmitido!!! y GRACIAS por contar tu experiencia!
Gracias a ti, por leerla! Fué realmente muy gratificante, la sensación que te queda, es una mezcla entre “ay Dios, como lo cuente mañana en el cole….” y una orgullo de “que bien poder hablar con ellos de éste modo”, se que hice bien, pero luego lo cuentas y hay madres que te miran con cara de pero que has hecho!! ¿como les cuentas estas cosas? Pero poco a poco creo que somos más las y los que entendemos que se debe ser natural ante el sexo.
La frase más graciosa que siempre les digo cuando se tocan en casa estando nosotros delante es: “os tengo dicho que delante de mamá no se hace, que si no lo contaré a tus amigos y amigas cuando seas adolescente y verás la gracia que te hace entonces”. Se ríen a carcajadas por la cara que les pongo, pero lo cierto es que no entienden porque les va a dar vergüenza. Cuando sean adolescentes se lo recordaré….
En cuanto a hombres, te puedo decir que mi padre en su época (hace 25 años, ole sus huevos) sí me habló de esto. El de mis hijos está lejos (estoy separada y él en otro país), pero tanto él como mi pareja les hablan de modo natural sobre el tema.
Gracias Fati. Tus palabras me han sido una gran ayuda. Las cosas son mucho más sencillas de lo que parecen.
Gracias a todos por vuestros comentarios. Vi los vídeos de Pablito y Virginia que nos sugería Luisa y me han parecido maravillosos. Tengo un hijo de 8 años y una niña de 7.
En muchas ocasiones, desearían estar en contacto físico conmigo por lo que se refiere a querer lamer los pechos. Por otra parte, el mayor desde hace poco le gusta olerme la vulva. Dice que le gusta mi olor. Yo no les dejo hacer ni una cosa ni la otra. No se como reaccionar.
Fati, ¿me das una ayudita?
Hola Maribel! Está claro que tus hijos, con esa edad, no conciben el sexo como lo concibes tú. Ni siquiera son conscientes de aquello que te piden y a tí te da rubor. Simplemente están descubriendo otras zonas del cuerpo, las cuales a todos de pequeños nos han parecido fascinantes. Zonas que tienen otro olor y además observan que los mayores las tapamos, o cuando las nombramos nos entra la risa o la vergüenza. En ese caso más les llama la atención y es posible que se puedan preguntar ¿para qué sirve esto que los mayores esconden tanto?
Es normal que te hayas sentido agobiada, es dificil explicar a un niño para qué sirve esto o que no debe tocar ahí. Si les dices simplemente ahí no se toca, ellos evidentemente se sentirán contrariados o tendrán más curiosidad.
Puedes explicarles que (debido a sus edades), en cuanto a tus pechos, cuando ellos nacieron éstos servían para alimentarles cuando aún no podían alimentarse por ellos mismos, y que ya no tienen leche y por tanto no sirven para ello. Y respecto a tu vulva, puedes decirle a tu hijo que es el lugar por donde nacen los niños y que es muy sensible, al igual que el pene de los hombres. Vuelvo a reiterar en el punto de 6 a 12 años en el que los padres tienen que enseñar a sus hijos que la intimidad es algo que se debe respetar, en este caso, explícate con naturalidad y añadiendo que es algo muy íntimo y que lo respete, para intentar que no insista en querer olerte.
Me despido repitiéndote que seas natural, que no te extrañes de conductas inocentes en tus hijos. Ellos necesitan una explicación a todo, y encima nosotros hemos de dársela lo más lógica posible a su edad para satisfacer su curiosidad (qué tarea). Pero poco a poco, ya que tampoco es bueno demasiada información de golpe, y también intentar dar una explicación basándonos en la capacidad que tienen ellos de comprender y asimilar esa información.
Eso sí, la clave es que empiecen a comprender en lo que significa la intimidad para los adultos.
Espero haberte servido un poco de ayuda. Un abrazo!!! Fatima Magro
Gracias Fati, me había ocurrido lo mismo y no supe cómo actuar. Por suerte, al leerte veo que del todo no muy mal. Uffff!!! Qué alivio 🙂
Sí Fati, creo que el vínculo es sólido.
Ahora este hijo mío me va a hacer abuela! Fíjate si no han pasado años, pero si algo me ha quedado claro en el recorrido vital que he tenido con mis hijos es que he aprendido muchísimo de ellos: no solo me he limitado a educar, sino que me han dado lecciones de vida fundamentales.
Al hilo de lo que expresas, recuerdo que mi hijo mayor, cuando tuvo su primera eyaculación, se asustó un poco, y cuando llegamos nosotros que habíamos salido, él que estaba saliendo del baño me dijo: “mami, me salió “semen””…
Me dió tanta ternura, al ver su carita seria,y algo asustada, que lo acompañé a su cuarto, y estuvimos hablando un buen rato,acerca del tema.
Hablamos del placer, del cuidado de su intimidad, de perder el miedo a sentir.etc..
Fue una experiencia gratísima para mí,que marcó creo que un punto de referencia en la relación con él. Sin aspavientos,sin reclamos,sin nada que no fuera diálogo,contención y “empatía”.
Probablemente hayas establecido un vínculo de mucha confianza con tu hijo. Al hablar con esa naturalidad, tu hijo podrá confiar en tí y preguntarte sus dudas, contarte sus preocupaciones, gustos, etc. Que tu hijo confié en tí para preguntarte cosas sobre sexo es importantísimo, además, no importa que no sepas respondérselas. Siempre puedes acompañarle o recomendarle un centro de salud sexual para jóvenes, una consulta, etc. Lo importante es que confía en tí y está en tus manos ayudarle en lo que sea. Con confianza y empatía como bien dices. La figura de un padre/madre no sólo es regañar a los hijos cuando hacen algo mal (algunas personas tienen esa visión de sus padres). La figura de un padre/madre es aquel que nos guía en la vida con cariño, empatía y asertividad. Enhorabuena Alejandra!
¡¡¡¡¡Fantástico!!!!. Felicidades a todos los que habeis escrito y Gracias por este Artículo. Y los que no o hayais hecho aún , animaos a compartir vuestros pareceres al respecto.
Bes@s
A mi también me parece fantástico. Y también quiero dar las gracias por todos los artículos. Me alegro mucho de haber conocido este blog. GRACIAS
Me gustó mucho todo lo expuesto por Fati en el artículo.
Como madre de dos hombres ya (y con uno que va a ser papá en poco tiempo) creo que es fundamental que los papás-mamás, perdamos el miedo a hablar, a comunicarnos.
Es fundamental establecer un lazo amoroso que los invite a sentirse cómodos para poder expresarse (cuando son mayorcitos). Y cuando son más peques, que comienzan a preguntar, limitarnos a responder lo que preguntan. He pecado de “extenderme” en la explicación, y el niño, dejar de prestar atención una vez que él había satisfecho su curiosidad.
Es muy importante eso que acabas de decir. Que nos limitemos a explicar lo que nos preguntan. Podemos cogerlo con mucho ímpetu y pasarnos también de la raya, dándoles una charla magistral del tema, y eso tampoco es necesario ya que saturar a alguien de información es contraproducente. Como se suele decir, con mesura y en su justa medida. Además, vuelvo a destacar que: lo más importante es que aprendan que cuentan contigo
Al hilo de lo que expresas, recuerdo que mi hijo mayor,cuando tuvo su primera eyaculación, se asustó un poco, y cuando llegamos nosotros que habíamos salido, él que estaba saliendo del baño me dijo: “mami, me salió “semen””…
Me dió tanta ternura, al ver su carita seria,y algo asustada, que lo acompañé a su cuarto, y estuvimos hablando un buen rato,acerca del tema.
Hablamos del placer, del cuidado de su intimidad, de perder el miedo a sentir.etc..
Fue una experiencia gratísima para mí,que marcó creo que un punto de referencia en la relación con él. Sin aspavientos,sin reclamos,sin nada que no fuera diálogo,contención y “empatía”.
El libro ¿de dónde venimos? creo que fue un referente para muchos niños, sobre todo para los que era el único libro de “sexo” que se veía antes de los 10 años.
Personalmente creo q estaba muy bien.
El libro ¿De dónde venimos? lo ha publicado Ediciones Maeva este otoño. Ya era hora que alguien recuperara ese clásico!!!
Saludos
A eso se le llama una buena noticia. Voy a actualizar el post ya!!! Muchas gracias por el aviso.
Felicidades Fati,importantes y necesarias premisas, para conseguir de este, un mundo mejor.
Importante es la educacion sexual de nuestros menores, yo no tengo hijos, y gracias a dios, mi profesora de ciencias Naturales, era muy explicita en sus clases, decubri, y amprendi, junto a ella y mis padres, quiza un poco antes que el resto. me siguen acompañando aquellas vivencias y experiencias, y soy una persona que intento difundir el placer, como algo sano y responsable, una peticion: no ceses nunca en este aspecto, el que siembra recoje, algun día alguien te lo dirá agradecido, como agradecido lo hago yo hoy, de mis padres y profesora de Ciencias Naturales.
Feliz fin de semana a TOD@S !!
Lo de las faltas ortograficas…(no he sido yo) a sido mi movil 😉
Soy maestra de niñ@s de 9-10 años que esperan ansiosos que toque estudiar el tema de la reproducción.Al principio, las risas nerviosas impregnan el ambiente del aula pero poco a poco la curiosidad puede más y dejan paso a las preguntas. Este año descubrí unos vídeos de Pablito y Virginia muy didácticos y que me han resultado muy útiles, sin embargo no tuve la valentía de colgarlos en el blog de aula por temor a los comentarios de los padres, todavía existen demasiados perjuicios en torno al sexo.
Padres y maestros no debemos olvidar que en esta materia la información es tán importante como la formación. Seguramente la mayoría en su vida diaria no a tener muchas oportunidades de resolver una ecuación de segundo grado pero si se van encontrar con unas necesidades corporales y afectivas que deberán gestionar sol@s o acompañad@s. Desde la familia, en primer lugar, y luego en la escuela, debemos contibuir a la formación de las personas en todos los ámbitos.
Qué razón tienes Luisa. Me temo que muchos padres creen, equivocadamente, que educar en sexo hace que los chavales lo practiquen antes, cuando los estudios al respecto demuestran que tener información les ayuda a tomar decisiones más responsables y, muchas veces, retrasar la edad de inicio de sus encuentros. Ironías de la vida: ¡algo por lo que firmarían los padres que no quieren que se les hable del tema! En fin…
Gracias por advertirnos de la existencia de estos vídeos. Acabo de ver los ocho que están colgados en youtube (no queda claro si hay más) y son muy sencillos y fáciles de seguir.
Muy interesante, todavía me toca un poco lejos pero tomo nota. Por cierto, que no se nos olvide, que supongo que no, pero la misma preocupación que “ahora” hay por el tema sexual es aplicable a otros aspectos de la vida, porque sino se pulen todas las facetas del díamante este no sirve para nada por muy brillante que tenga una.
Nota: very important!!! Enseñar a pensar no a recitar. Enseñar a empatizar no sólo a simpatizar u odiar.
Me han encantado!!!, namaste guapa
¡Muchas gracias Fati!
Pues es un tema muy sencillo, pero a su vez muy complicado de adaptar a la capacidad de cada niño según la edad.
Quiero añadir el libro ¡mamá puso un huevo!
A mi me surgió un momento de ‘tierra trágame’ en una ocasión, pues por la edad de mi hijo no lo tenía ‘preparado’. Se nos estropeó el televisor, el técnico lo reparó y sintonizó. Pensé en borrar los canales comprometidos al día siguiente, pues ya era muy tarde. Y cuando salí de la ducha, mi hijo con 5 años me dijo lo que había visto en la televisión (una peli porno). Reconozco que no actué bien, pues a su edad no sabía explicarle lo que había visto. Me limité a decir ¡qué asco! y cambié deprisa. Con 5 años ¿Qué podía decirle que fuese cierto y llegase a comprender? En cuanto pude le comenté el caso a una psicopedagoga y me dijo los pasos a seguir, y era reconocer que eso se hacía, pero omitiendo la frecuencia, pues era innecesaria. Sino decir que es el procedimiento para cuando buscas bebés nada más. Al menos me sentí aliviada y sin sacar el tema, esperar si mi hijo lo sacaba y entonces retroceder y explicárselo así. La verdad es que no me volvió a preguntar, así que ahí se quedó la cosa.
Me parece muy interesante que los padres seamos sus educadores sexuales, pues si no es así, a la vista está de las cosas erróneas que hemos ido aprendiendo de boca en boca y por amig@s. Además sirve para que nuestros hijos siempre confíen en nosotros. Es muy importante que ante cualquier situación no alarmarse, mantener la calma, respirar hondo y dialogar.
Aprovecho, aunque no sea el lugar, pero informar que la FAD tiene también una biblioteca muy interesante para enseñar ese otro tema también tan complicado como son las drogas.
UN SALUDO 😀
Se me viene el típico ejemplo a la cabeza: una madre ve con su hija en la tv un programa en el que se habla de sexualidad. Seguro que a la madre se le pasan muchas cosas por al cabeza que quisiera decirle a su hija, y a la hija le quedan muchas dudas de lo que se está hablando. Pero la madre no habla porque la hija no pregunta, y la hija no pregunta porque la madre no habla. Resultado: nada.
Si queremos hablar con nuestros hijos sobre el tema, qué mejor que un contexto así para romper el hielo. De todas formas, no es tu caso, ya que tu niño tiene 5 años, pero es cierto que no fue la mejor reacción, aunque sí común. Seguro que para la próxima vez, con la ayuda de los materiales, sabrías cómo llevar mejor la situación. Además me alegro mucho porque se te nota que te preocupa el tema y te interesas, dice mucho a tu favor.
Enhorabuena por el post Fati, muy muy interesante.
Como tú doy charlas en coles e institutos y también a los padres, cuando se dejan claro, porque aunque la tendencia es a que los padres apoyen que sus hijos reciban educación sexual, la tendencia también es que te dejen al niño ahí como diciendo “ahí te lo dejo, edúcamelo”, será cosa de la vergüenza pero por desgracia son pocos los padres (madres alguna más) que se implican en este cometido.
Déjame acabar con el eslogan del “XV Congreso Latino Americano de Sexología y Educación Sexual” celebrado en Alicante, en Octubre de 2010.
¡¡¡Por una Sexualidad Feliz y Responsable!!!!
Gracias por ayudarnos a educar mejor a nuestros hijos. A ver si ellos logran empezar con mejor pie que nosotros. Pensaba que no existía material y me ha impresionado la cantidad de recursos que proponéis. Es una pena que no hagan más en los colegios. Tengo dos chicos de 4 y 9 años, o sea que ya me he apuntado a los dos pdf y a los libros recomendados.
Muchas gracias Leticia. Me alegra saber que te interesas mucho por la educación sexual de tus hijos, seguro que te va genial aprendiendo cómo hacerlo. Si necesitas más cosas, ya sabes.