1. Soy una mujer heterosexual, de 47 años. Me casé a los 23, tras un noviazgo de 5 años con el primer novio serio que tuve y con quien tuve relaciones sexuales por primera vez. A pesar de ello me consideré una mujer afortunada en el plano sexual durante muchísimo tiempo. Sobre todo a juzgar por algunas experiencias decepcionantes que me contaban amigas cercanas.
2. Cuando nos conocimos mi marido y yo, ninguno de los dos tenía experiencia previa, pero por alguna razón inexplicable nos tuvimos muchísima confianza, lo que hizo que el proceso de iniciarnos en la sexualidad fuese gradual, natural, muy bonito y hasta gracioso.
3. Ninguno de los dos éramos pacatos ni inhibidos a la hora de experimentar en la cama. Probábamos de todo: posiciones, lugares, caricias, masturbación, sexo vaginal, oral, anal, dominación… Me encantaba que me dominara, con gusto me plegaba a sus deseos, a sus órdenes, era la esclava perfecta, estaba absoluta y completamente enamorada de él. No se me pasaba siquiera por la cabeza la posibilidad de fijarme en otro hombre… eso sí, sólo los dos. La posibilidad de incluir a un tercero(a), la reservábamos para nuestras fantasías, algunas de las cuales por cierto, llevamos a la práctica. Solo para descubrir que hay fantasías que parecen muy buenas, pero que cuando las llevas a la realidad son bastante decepcionantes.
4. Los primeros 5-6 años de matrimonio, tuvimos muchísimo sexo, en ocasiones pasábamos los fines de semana encerrados en el apartamento, desnudos todo el día y dedicados a tener sexo como locos. Luego vinieron las hijas, las obligaciones, el trabajo, los estudios y poco a poco fueron disminuyendo la frecuencia y las ganas. Hasta llegar al punto de comenzar a tener relaciones sólo en la madrugada, cuando mi marido se despertaba empalmado y me convencía para tener un rapidito.
5. A mí esta situación me molestaba. La perspectiva de despertarme a las 4 o 5 de la mañana porque él tenía ganas, y además hacerlo sin mayores preámbulos y mas dormida que despierta, no me hacía ninguna gracia. En más de una ocasión se lo hice notar, le decía que si bien un rapidito es apetecible cuando no hay mucho tiempo y sobran las ganas, no podíamos limitarnos a que esa fuera la única manera de tener sexo.
6. Al principio hicimos algunos esfuerzos por cambiar esa situación, que algunas veces funcionaron (las menos) y otras veces no (las más). Por ejemplo, acordábamos en la mañana que esa noche o el fin de semana tendríamos una sesión de sexo especial, con lo cual yo pasaba todo el día pensando en cómo iba a ser la cosa, me preparaba, me ponía lencería especial. Solo para que, llegado el momento de entrar en la habitación, lo veía dormido frente al televisor, o despierto pero molesto, porque yo no había soltado todo y corrido a sus brazos apenas había llegado de la oficina. Me había “distraído” atendiendo a las niñas, en los quehaceres de la casa, preparando la cena, etc.
7. En algún momento nos llegamos a plantear la posibilidad de buscar otras personas, con las cuales pudiéramos experimentar y comparar. Fue conversando acerca de lo curioso e inusual que resultaba hoy en día que existieran personas como nosotros, que no hubieran tenido ninguna otra pareja sexual más que con la que estaban. Yo por mi parte lo tomaba en broma, así que nunca le di mayor importancia.
8. Hasta que un día hace 5 años, y por esa especie de sexto sentido que tenemos las mujeres, comencé a sospechar que algo extraño estaba pasando. Sobreponiéndome a mis escrúpulos, revisé su teléfono (cosa que nunca jamás había hecho antes), y descubrí una gran cantidad de mensajes que evidenciaban que andaba enredado con otra mujer. Mi primera reacción, en lugar de enfrentarlo abiertamente, fue la de tratar de encontrar otras evidencias que terminaran de convencerme.
9. Lo que hizo estallar todo el conflicto fue una fotografía que encontré en la carpeta de imágenes de la PC que usaba toda la familia, en la cual se veía a una mujer desconocida, dándole sexo oral. Para hacer el cuento corto, y contrariamente a lo que hubiera podido esperarse, le perdoné y continuamos casados. La situación se mantuvo más o menos invariable. Al principio yo lo justifiqué como una consecuencia natural del paso de los años, etc., pero ni yo misma me lo creía.
10. Esa situación cambió hace 2 años, cuando aburrida, comencé a reunirme con amigas en bares, para conversar. Fue así como conocí a JC, un hombre buen mozo, 56 años, casado y aburrido igual que yo, con quien sólo con besarnos, revivió en mí todas las ganas, la emoción, la lujuria que yo creía que nunca más sentiría.
12. A mí me encanta practicar sexo oral, me fascina ver como disfruta mi pareja, su placer es mi placer, me regodeo al chupar su miembro. Lo chupo como si se tratara de una chupeta, recorriéndolo con mi lengua, dándole suaves mordiscos, tragándomelo entero, moviendo la cabeza de arriba a abajo y apretando fuertemente mis labios para que sienta mi boca más estrecha… El pensar que puede acabar en mi boca en cualquier momento me excita muchísimo.
13. Pero… oh, decepción. Ya se bien cuantas veces han dicho por aquí que el tamaño no importa, pero, vamos, ¡por dios! La primera vez que quise hacerle sexo oral me alarmé; en un primer momento, pensé que a lo mejor el pobre habría sufrido algún espantoso accidente que le había hecho perder parte de su miembro, pero no, ¡era miniatura! Ante ello tuve que hacer de tripas corazón y como las ganas eran muchas, pues bastó para esa primera vez. Para hacer el cuento corto de nuevo, nos acostamos en 3 oportunidades. La primera vez fue decepcionante, entre el susto por el tamaño de su pene y porque resultó ser un amante muy poco imaginativo y con problemas de erección. La segunda y tercera oportunidad resultaron tan poco satisfactorias como la primera, por lo cual decidí cortar por lo sano y no verlo más.
14. Poco tiempo después conocí a D., un hombre joven de 34 años. Con él me decidí a tener algo, porque me parecía súper excitante el hecho de que una persona mucho más joven que yo quisiera tener algo conmigo y porque quería probar que se sentía (carne fresca, me decía yo para mis adentros). Al igual que con el anterior, la experiencia fue bastante decepcionante. El tipo resultó ser un maniático obsesivo de la limpieza: la única vez que lo hicimos llegó a la cita con el cabello aún mojado de la ducha que se había dado en su casa antes de verme, lo cual en principio me pareció un detalle bonito de consideración hacia mí. Una vez en el hotel, me propuso que nos ducháramos de nuevo, ante lo cual pensé que sería más por mí que por él, considerando que yo había estado todo el día en mi oficina. Luego de que lo hicimos (lo cual por cierto, tampoco resultó la gran cosa) insistió en que nos ducháramos nuevamente y, cuando comenzábamos a calentar para un segundo round, recibió una llamada telefónica que le hizo interrumpir y disculparse porque tenía que irse a resolver un problema urgente en su negocio, pero antes de irse… ¡se duchó nuevamente! A éste decidí no darle más oportunidades, así que al día siguiente, cuando me llamó, entusiasmado y diciéndome que le había parecido una experiencia maravillosa e inolvidable, le dije sin pelos en la lengua lo decepcionante que me había parecido la experiencia y que no quería repetirla.
15. Después le correspondió el turno a J. Nos conocíamos desde hacía algún tiempo. Desde el principio nos habíamos sentido fuertemente atraídos el uno por el otro y ambos éramos conscientes de ello. Solo nos habíamos atrevido a tener eventuales sesiones de sexo telefónico en donde intercambiábamos comentarios o fantasías explícitamente sexuales, que en más de una oportunidad nos hicieron acabar, y yo quedaba completamente encendida. En una ocasión, al salir de tomarnos unos tragos en el bar a donde siempre íbamos todos, nos encontramos en su auto y le dí una mamada espectacular que lo desarmó por completo. Me invitó a su apartamento y yo no dudé en ir. Una vez allí nos dirigimos a la cocina en busca de un poco de agua para mí y allí mismo me saltó encima y empezamos a besarnos con una pasión desenfrenada. Empezó a quitarme la ropa y antes de que pudiera reaccionar ya estaba completamente desnuda y tirada contra el duro y frío piso, se montó encima de mí, me penetró y 30 segundos más tarde había acabado. Ni que decir tiene que me quedé colgada y el fulano ni siquiera tuvo la decencia de reparar el gatillazo. Luego de este penoso episodio (vergonzoso para él, pensaba yo) no nos llamamos por algún tiempo, lo cual estuvo bien para mí, creyendo que seguramente estaba muerto de vergüenza por el papelón que había hecho. Pero no, unos meses más tarde comenzó a llamarme de nuevo y a preguntarme cuándo lo repetíamos. No quise lanzarle el balde de agua fría como lo había hecho con el anterior, en vista de lo terriblemente ofendido y dolido que se había quedado, así que sencillamente le dije que había sido un placer, pero que no volvería a repetirse. Desde entonces ha continuado insistiendo, así que eventualmente tendré que sincerarme y decirle lo lamentable que me resultó la experiencia.
16. Por último, me acosté con A. Un hombre encantador y bastante mayor que yo, 67 años, aunque muy bien conservado. La primera (y también única vez) que nos acostamos resultó bastante mejor que las 3 experiencias previas. Este hombre sí sabía cómo hacer el amor a una mujer y satisfacerla. Peeero… (siempre hay un pero) también lo tenía pequeño, desgraciadamente. Aunque lo que le faltaba de tamaño lo compensaba con mucho fuego, pasión y buenos movimientos. El otro pero es que el hombre hablaba hasta por los codos mientras lo hacíamos, por diosss… Está bien que yo le hubiera dicho que me excitaba que me dijera cosas sucias al oído mientras lo hacíamos, pero no era para que se quedara pegado como un disco rayado durante todo el tiempo que duró el asunto. Me provocaba ponerle una almohada en la cara: “Ya cállate, ¡por favor! ¡Me desconcentras!” A pesar de esos peros, me gustó la experiencia y cuando estaba empezando a considerar tener una relación más duradera con él, resultó que el hombre se enfermó con una dolencia en la columna que se agravó tanto que tuvieron que hospitalizarlo y en vista de que no mejoraba, operarlo para resolver un asunto de un nervio, una vértebra, algo así… Este hecho me hizo sospechar que lo que le había pasado había sido una consecuencia directa de la sesión de sexo que había tenido conmigo. Así se lo comenté, aunque, por supuesto, él lo negó categóricamente. Luego, apenas unos días después de salir del hospital, me anunció que se marchaba por tres meses a Madrid a pasar las vacaciones con su hija, y desde entonces no lo he visto más.
17. Entonces a ver: ¿será que yo soy muy exigente y mis expectativas de lo que debe ser un buen amante son muy altas y debo bajarlas? ¿O será que he tenido tan mala suerte como para toparme con cuatro hombres seguidos que son un fiasco en la cama? ¿O sencillamente es que no he sabido escoger?
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Hola a todos, yo soy un hombre casado por 35 años, y pienso en base a mi experiencia que no tienes la valla alta, cuando tenemos sexo con mi esposa mi mayor disfrute es verla gozar que tenga varios orgasmos, y que sea siempre especial y es nuestro deseo darle todo el placer que su cuerpo le pide, es el mayor disfrute que uno puede tener, pero si uno busca su propio placer como hombre a dejado la parte mas importante del sexo, es ser egoísta solo buscar solo el disfrute para uno, creo que todo hombre se convertirá en un buen amante cuando busca el placer para ella, este es la realidad y no la escondamos, son relaciones basadas en el egoísmo no en el DAR.
Creo que sí eres muy exigente, formas parte del grupo de mujeres que presume de que una mujer es casi imposible de satisfacer, que si el tamaño, que si habló mucho, que si tiene plata, bla, bla, bla, tienen tan metido el príncipe azul en su cabeza que cuando les sale un hombre normal, que es con el único que pueden experimentar, se dan cuenta, con dolor, que son casi frígidas, seres ya oxidados que para hacerlas llegar toca prenderles una veladora. Por como hablas
Hola, definitivamente tu ojo no ha dado en el punto de tu interés. Es bueno que analices algunos factores tales como el entorno donde te relacionas con esos personajes. Pienso que para responder a las necesidades afectivas y sexuales de una dama hay que estar en forma, me refiero hacer algo de ejercicio, cuidarse en la comida y demás hábitos de la vida diaria incluida la formación y el estudio en ese aspecto. Podrías probar algo de tantra-sexual o yoga en ese sentido. Bueno, hoy no sé cual será tu suerte en el asunto. Saludos. si quieres compartir conceptos: [email protected]
Creo que has tenido muy mala suerte, no sos exigente. Realmente no has dado en el clavo. ¿Los de 37 te van? Ja. Besos y muy bueno tu relato.
Claro que me van los de 37, jajaja…., muchas gracias, Cristian. Pero si supieras que para mí es más importante la química, el “pase de corriente”, la atracción…, como lo quieras llamar, que pueda establecer con la otra persona que la variable edad. Es decir, yo no veo la edad, para mí es simplemente alguien que me parece atractivo, que encuentro interesante y que despierta mi libido, independientemente de la edad que tenga, a excepción del caso que relato del chico más joven que yo, en donde sí tuvo que ver mucho la parte de la curiosidad, de saber que se sentía hacer el amor con alguien más joven, pero definitivamente, no me calificaría a mí misma como una “cougar”, yo no soy discriminadora, me gustan los hombres de todas las edades.
mi historia es similar a la tuya , buen sexo con mi ex , despues la monotonia y la poca frecuencia , cuando me separe me volvi loca , dicen que es normal …. se diferenciar que es sexo y que es amor , asi que lo vivo con mucha libertad , lo que queria contar es que a mi me paso al reves
me encontre un primer pene muyyy grande , cuando lo vi , ya le dije rapidamente que me haria daño , el me aseguro que no , pero la verdad es que molestaba bastante,alli se me marcho todo el alivido , el no era muy generoso , asi que una vez y nada mas
al poco tiempo me encontre otra de mas grande y sabiendo ya que no me gustaba , me decidi por el sexo oral , para no dejarlo colgado , el no queria , por haber tenido malas experiencias con los dientes , al final todo fue bien y este si sabia satisfacer una mujer , pero una vez y nada mas
ahora estoy enamorada , mi chico no es un 10 , pero le encanta aprender , es generoso y me quiere , he tenido muchisima suerte , espero que me dure
amor y buen sexo para to@s
Yo también pienso que la primera experiencia no es como en las películas. Mi experiencia no coincide para nada con la del relato. He tenido dos relaciones fuera del matrimonio y con los dos he disfrutado muchísimo. Cierto es que la primera cita no fue para lanzar coetes pero sirvió para que repetieramos y acabaramos teniendo verdaderas sesiones de sexo puro. Los dos eran grandes amantes declarados del sexo y con ninguno de ellos hubo ningún tipo de tabú ni negación, solo era dejar volar la imaginación y querer disfrutar y sobre todo hacer disfrutar mutuamente. Supongo que he tenido mucha suerte.
Si que soy conciente que estas dos experiencias han dejado el liston muy alto.
Hola Neofita!! Me ha encantado tu relato.
En la parte que nombras los chascos que te has llevado al buscar una buena pareja sexual me he sentido identificada. No creo para nada que seas exigente, es lo mismo que me ha pasado a mí y a muchas mujeres que conozco.
Desde mi humilde opinión, creo que el problema está en que muy poca gente se responsabiliza de tener una buena educación sexual, sana y libre.
En el caso de los hombres ( no todos, por supuesto ) , lo que yo veo, es mucha fanfarronería en el tema sexual pero muy poca información y mucho egoísmo, con lo cual es normal que se den este tipo de situaciones, también hay que pensar que el sexo es muy subjetivo y lo que a uno le puede gustar, a otro no, con lo que se complica mucho dar con una buena pareja sexual.
Yo también estoy en la búsqueda de esa persona, así que te animo a que ¡no decaiga el ánimo!
Hola Neofita!! Me ha encantado tu relato.
En la parte que nombras los chascos que te has llevado al buscar una buena pareja sexual me he sentido identificada. No creo para nada que seas exigente, es lo mismo que me ha pasado a mí y a muchas mujeres que conozco.
Desde mi humilde opinión, creo que el problema está en que muy poca gente se responsabiliza de tener una buena educación sexual, sana y libre.
En el caso de los hombres ( no todos, por supuesto ) , lo que yo veo, es mucha fanfarronería en el tema sexual pero muy poca información y mucho egoísmo, con lo cual es normal que se den este tipo de situaciones, también hay que pensar que el sexo es muy subjetivo y lo que a uno le puede gustar, a otro no, con lo que se complica mucho dar con una buena pareja sexual.
Yo también estoy en la búsqueda de esa persona, así que te animo a que ¡no decaiga el ánimo!
Me encanta la sinceridad del relato. Ahora, yo te digo, no es que seas exigente. Es que has dado con gañanes. Y, sobre lo de no decirle nada, estoy totalmente en contra. Dices que acabó a los 30 segundos y no hizo nada por repararlo????? Es decir, según entiendo, que no te hizo disfrutar a tí,. Pues se merece saber que es un inútil que ni siquiera sabe hacer disfrutar a una mujer, no debes escondérselo, por egoísta, igual así se pone las pilas y una amante suya que llegue luego podría agradecértelo.
Gracias x compartir tu historia! M ha gustado muchísimo….
Creo q lo más importante para tener buen sexo con una persona es q haya “buen feeling”… “Buen rollito”….”química”..o como queramos llamarlo…..entonces aunque haya “imprevistos” ….con buena voluntad por parte de los dos seguro q algo bueno se saca del encuentro…. es mi opinión….lo q no sería creíble es q hubieses pegado unos polvos de la ostia con todos los tíos….eso solo pasa en las películas…sigue buscando, probando….no desistas!!!! Lo mejor está por llegar….segurísimo!!!!!
coincido mucho con el comentario de hum. Suerte y comenza de cero nuevamente. Nadie de buenas a primera te conoce ni tu lo conoces.
Es difícil encontrar un buen amante a la primera o con quien te compenetres, con tu marido creciste sexualmente lo que deja el listón muy alto para todo el que se te acerque. Yo estuve separado de mi mujer y siempre recurría a mi para tener buen sexo por que me relataba situaciones muy parecidas, la verdad también fue cuando mejor nos compenetramos.
Expresivo y muy bien narrado relato.
Siento tu mala fortuna en esas pocas experiencias extramatrimoniales que has tenido, aunque realmente no sé si ha sido mala suerte o es que eres, como dices, una mujer exigente.
Me da la impresión que tu vida sexual no es nada atípica: mucha fogosidad al principio para, unos años después, dejar paso a la rutina y a las ganas de vivir nuevas y más intensas experiencias sexuales que os hagan sentir vivos/as.
Tu frustración con estas aventurillas me hace pensar en lo realmente difícil que es encontrar una pareja sexual para alguien con cierto nivel, asi que no te desanimes porque creo que lo que te ha pasado también responde a la normalidad estadística.
En fin, espero que puedas ampliar en breve tu relato con alguna experiencia más que realmente te haya hecho vibrar.
Hola! Gracias por compartir tu historia! A mi me parece que no es un tema de suerte ni de ser muy exigente, creo que uno atrae lo que proyecta, aún sin ser consciente de eso. Quizás aún no estés preparada para lanzarte a una historia nueva, tal vez internamente no has resuelto ni superado la pérdida de esa persona que formó parte de tu vida por tanto tiempo, con la que compartiste tanto… Una puede decidir cortar de raíz algo que siente que ya no le aporta nada, pero inevitablemente queda ese vacío…. y es preciso darse tiempo para procesar el duelo… Sólo cuando estés bien contigo misma, atraerás la persona adecuada!
Mucha suerte!
Pérdida?? vacío?? duelo?? estar preparada??…o me he perdido yo o te has perdido tú Andy.
Opino lo mismo que karicaturax.
La respuesta de andy la veo como una desafortunada interpretación psicoanalítica procedente de un aficionadillo a la psicología barata.
Perfectamente puedo estar equivocada, no me creo la dueña de la verdad en absoluto… di mi opinión, acertada o no, es lo que pienso, y no por ser una “aficionadilla (soy mujer) a la psicología barata” sino porque lo he vivido y tengo amigas a las que también les ha ocurrido… Puede que ella no lo viva así… En lo que a mi concierne la sexualidad no es solo carne, cuerpo, penes, vaginas con movimientos y poses super entrenados… para mi el sexo empieza y termina en la mente y si algo no está del todo resuelto en nosotros mismos, dificilmente podamos encontrar a alguien que nos satisfaga… la piel, el cuerpo, los genitales son apenas el vehículo para llegar al placer que se gesta en la mente… es mi punto de vista, respeto que haya otras posturas, así como entiendo que en la diversidad de personas que hacemos este mundo, nadie siente ni vive todo de igual manera y celebro que así sea!
Andy, yo tampoco soy el dueño de la verdad, por lo que yo tampoco sé si lo que yo hemos opinado es lo correcto, aunque lo que dices en tu ultimo post me parece razonable.
Efectivamente, a todos nos guían unos esquemas o unas experiencias cuando interpretamos un relato.
Si la autora responde a tu post, sabrás si tienes dotes de psicologa o no, asi que disculpa mi comentario que solo respondía a la impresión que me causó.
Saludos.
(Contexto loco!)
A ver si atrae a alguno con un pene más grandecito… jajajajaja… Me quedo con eso. Eso sí que es mala suerte.
De anécdotas estamos hechos todos. Y yo creo que es eso lo que nos está contando ella.
Creo que, por un lado lógicamente, a esta mujer que se acerca a la cincuentena, le falta la experiencia que, tal vez debía haber adquirido antes de casarse. O durante el mattrimonio, en términos de juegos sexuales con su marido. Por otro lado, es probable que su propio sentimiento de culpa por su infidelidad, le impida encontrar al amante que la satisfaga. El sexo precisa de experiencias y de un buen número de juegos y de parejas sexuales para poder comparar y aprender de cada una de ellas.
Perdona que me sonría, Paula, con tu comentario.
No sé porque se recurre al tópico fácil de la interpretación según la propia experiencia o conocimientos.
¿Crees realmente que una persona de 50 años que se considera abierta al sexo y que ha tenido su historia de éxito sexual en su matrimonio no tenga la suficiente experiencia como para disfrutar de unos encuentros esporádicos ?
¿Qué te hace pensar que fue el sentimiento de culpa lo que le impidió disfrutar de los encuentros, cuando a esta mujer se lee tan claramente y en ningún punto habla de ese sentimiento?
Tus vivencias me han arrancado una sonrisa de principio a fin.
Chica,lo tuyo es el colmo de los colmos.
Exigente?? por supuesto,y no se te ocurra no hacerlo.Cuando se espera algo,en este caso un buen rato de placer mutuo,es decepcionante que no ocurra ni la mitad de lo esperado.
El tamaño importa,está claro,pero no necesariamente tiene que ser impactante porque el chico puede tener otras virtudes que te hagan volar.Se puede tener muy buen sexo sin penetración.Si después no quieres repetir,por lo menos te llevas una experiencia sexual,sea o no,la mejor de tu vida.
Mi experiencia personal es amplia y tengo anecdotas de todo tipo.
He hecho de maestra,he dicho lo que me gusta,lo que quiero que me hagan,he tomado las riendas en la mayoría de las ocasiones…y otras veces he optado por ver hasta donde llega la imaginación de mi acompañante.Y desde el minuto uno,saber si voy a volver a verle o no y saber si iba a llegar a tener un orgasmo.
Neofita,intenta disfrutar exigiendo,pidiendo,porque realmente es lo que necesitas.Si no,por qué hacerlo??
Te deseo lo mejor y gracias por tu relato.
Lo primero que me vino a la cabeza leyéndote fue el chiste de “- ¡Camarerooo! Hay un pelo en mi sopa. ¡Esto es inaudito! – No, lo inaudito es encontrar un fideo en un coño.”
…Y tú ya llevas dos. Que me perdonen los micropenes, que también tienen derecho a vivir.¡Pero no todos alojados en esta mujer, mireusté! Me he divertido un montón leyéndote, tú no tanto viviéndolo vale, pero esto es de traca, algo bueno tiene que llegar, te lo mereces. Gracias.
Risa me ha dado tu comentario jajajajaja, pues todos los hombres tienen derecho, me he acordado de una amiga que tuvo un encuentro sexual, si se puede llamar así, con un muchacho con las características que mencionas, o sea, un ” fideo “, y el muchacho le dijo una frase que no menciono por pudor, pero me dio mucha gracia porque la frese decia algo parecido a : coge mi____, pero con exageración como si tuviera un buen chorizo jajajaja, mi amiga inmediatamente tuvo que salir de la habitación jjajjjaja. Que conste, mi risa es por la frase, no por el defectico del chico.
Genial… jajajajaja… Ambas…
Una primera única experiencia es difícil que resulte exitosa para los dos. Si los hombres tenemos querencia penetratoria, las mujeres tienen tendencia a dejarse hacer, o sea, mal asunto. Una posibilidad sería tener el valor de plantear al chico, antes de tener sexo, lo que a ella le gusta hacer y que le hagan, pero para esto hay que ser lanzada y plantear el sexo antes de hacerlo, cosa que no necesariamente ellas hacen. Otra sería llevar las riendas durante la acción, pero a veces la acción llega cuando ya todo está manga por hombro y no hay manera de poner orden. La mejor opción, obviamente, es que el chico no sólo sea amante bueno y generoso, sino que entienda al género femenino… y que el género femenino que esté en vías de desnudarse se dé a la acción y no a la contemplación.
En una relación más continuada creo que se impone hablar y contar lo que se desea y cómo, así como averiguarlo del otro y estar dispuesto a hacerlo. En esa relación es mucho más fácil ser primero generoso y luego egoísta, y no al revés.
Aunque soy del género masculino, confirmo que muchos saben hacerlo bien y se entregan a ello con generosidad. Has tenido mala suerte. No te resignes. Busca y encontrarás y mientras tanto te divertirás.
Bravo por tu ameno e interesante relato.
Me encanta como escribes. Un abrazo.
Guiño un ojo
Me encanta el desparpajo con el que cuentas tu historia y agradezco, de corazón, que la compartas con tanta gracia. Quiero que quede bien claro que me ha encantado leerla… por lo que voy a escribir a continuación. No puedo dejar de pensar que si un hombre hubiera contado sus aventuras con ese tono, más de uno y una le hubiera saltado a la yugular.
Pienso, por ejemplo, en el confesionario anterior. El señor se atrevió a decir que su mujer no le daba lo que quería y que dejo a su amante porque le canso con tanta demanda. La que se lío. Y hay otros confesionarios de varones que han sido criticados por experimentar y contarlo con la misma sinceridad que tú. Insisto no te lo tomes como crítica a ti, porque NO es a ti a quien critico, critico a la gente que mide con doble vara y moraliza y cuestiona todo menos su propio comportamiento.
En cuanto a tu historia, la verdad es que no has tenido mucha suerte con tus amantes, pero seguro que encuentras a alguno que sabe… Tiempo al tiempo. ¡Y si no le enseñas!
Yo tambien pensé lo mismo, y recorde el relato al que te refieres, pero no he querido entrar en ese tema debido al revuelo que se formo en el anterior.
También me lo pensé dos veces, pero decidí que eso es lo que acaba pasando, que nos callamos para no tener broncas, y al final no propiciamos los cambios.
Si me abroncan, que me abronquen… ¡tengo piel de elefante! Buen fin de semana Juan70!
Bravo Nina!!!. Me parece perfecta tu actitud. Hay que promover los cambios. Como ya he dicho en varias ocasiones el movimiento se demuestra andando.
Porque los silencios son los mayores cómplices de las injusticias y el inmovilismo.
También pensé en decir algo al respecto, pero no quise entrar en polémica. Está bien que lo menciones.
Cada persona tiene su punto de vista, podemos coincidir en muchas cuestiones y solo es necesaria una para estar en desacuerdo…. es la vida en estado puro. Feliz fin de semana a tod@s.
Le he dado vueltas al asunto. También depende del contexto y de como se lleve en pareja la relación. Si cabe o no, la presencia de otra u otras personas. Creo que en el confesionario anterior, se plasmaban los sentimientos de él hacia ellas, el sufrimiento, un aborto, … Muchos factores de sufrimiento. En este confesionario, se plasman las ganas de ella de conocer y tener experiencias sexuales, no se mete en los sentimientos, ni en la posibilidad de culpabilizar a alguien ni de se hacer victima a alguno.
En definitiva, el contexto y los pactos en las relaciones. Como en todo.
Será que en parte tiene que ver con la falta de confianza con esas personas, qué al no ser una relación continuada es muy difícil que a la primera salgan las cosas cómo queremos incluso , aunque sepamos lo que queremos?. ¿Será que tener buen sexo en la primera cita es cuestión de suerte? de dar con un hombre o mujer apropiados, que realmente valore el sexo como algo más que la satisfacción inmediata. Tendrá que ver también con las expectativas propias , con las del/a individu@?.
Aunque creo que las expectativas si afectan al encuentro sexual, esto no puede ser toda la razón porque no sale bien un encuentro. Así que probablemente afecte la calidad de la experiencia de la otra persona, digo yo., o que la interacción de ambos no es la adecuada.
Bueno, creo que me repito mucho. De todos modos , has tenido experiencias y eso también es importante, al menos para saber lo que no quieres…
Y ojovertical dice cosas a tener en cuenta y valorar.
Me uno a esas decepciones, me ha pasado un montón de veces y me he planteado esa misma interrogante: Seré muy exigente? pues soy bastante imaginativa y fantasiosa y como decimos aquí MONTO EL QUESO a algún muchacho y después no satisface mis espectativas, y como me decepciona ver algo pequeño, sin ánimos de ofender pero un eyaculador precoz es admisible, pero creo que un microp… es más difícil para mí, no es que tengan que ser enormes, pero sí necesitamos sentirlos dentro de nosotros. No tienen que ser espiderman y lanzarse desde un edificio para que nos la pasemos bien, pero sí dedicarnos un tiempo a lo que nos gusta, y no pensar solo en ellos y su satisfacción, el hombre inteligente saca provecho de ellos y si hay química puede que haya un mejor resultado. Busca un buen orgasmo, aunque sería lindo que lo encontraras en tu pareja, o si encuentras por fin ese hombre te plantees el dejar a tu esposo, ya que las cosas no andan igual. De cualquier manera mucha suerte en tú búsqueda, yo ando igual……
Me encanta como cuentas tu historia (Yo quisiera escribir así). Me quedé sin saber cómo va todo con tu marido.
Me rei mucho con la parte del hombre de 67 años que no paraba de hablar, que bueno… jajajaja.
No es que seas demasiado perfeccionista. Creo que no hay que esperar nada cuando vas a tener oportunidad de estar con alguien en la intimidad. Sí… es cierto y sé que nos gusta imaginar como serán los encuentros,…. Mi consejo, trata de imaginarlos con otras personas y no con los que conoces y vas a tener la oportunidad de tenerlos.
Vamos a ver, creo que alguna vez llegará alguien que te satisfaga tus expectativas, cada uno es un ser único. Seguro que encontrarás personas con las que disfrutar tu sexualidad sin niveles ni puntuaciones, sin tamaños, ni buen o mal movimiento. Será una mezcla de todo. Inclusive de sentimientos encontrados con el otro.
Mucha suerte en la búsqueda o en el hallazgo o en el que llegue por sorpresa sin esperarlo. Besos.
Yo también he pasado por dos divorcios y variadas relaciones entre medio y posteriores… así que sé de lo que hablas… el gran problema de los hombres es que no saben satisfacer a una mujer porque la única fuente de la que aprenden es de la pornografía, eso en el mejor de los casos, si además se les junta eyaculación precoz, falta de erección y/o tamaño, apaga y vámonos… la comunicación e intercambio de experiencias con la que contamos las mujeres hace que sepamos lo que queremos y no queremos… somos unas grandes privilegiadas 😉
Para nada creo que seas muy exigente. Para nada. Creo que has tenido mala suerte, bastante. Lo que pidas del sexo es lo mínimo que se debe exigir y encima eres lo suficientemente valiente y clara contigo misma para dejar claro cuando no quieres repetir una experiencia porque no te ha gustado. Estoy segura de que darás con un hombre con el que disfrutes plenamente.
Ya es mala suerte que te toquen, continuados, penes chiquititos, eyaculadores precoces, gatillazos, problemas de erección… jope, no es lo común… mira que he conocido a hombres, y pocas veces he dado con esas situaciones. Se nota que eres una mujer que sabe bien lo que le gusta en la cama, así que la cosa estará, en mi opinión, en que sigas probando (cuestión de probabilidad ¿no?).
Jajaja… sí, mala suerte, eso mismo digo yo! Pero además esas experiencias me han dejado sorprendida al constatar cuánto supuesto “macho latino” que anda por allí, en realidad tienen verdaderas tragedias en su vida sexual! cuanta desinformación, cuanta ignorancia! Con mi primer amante, llegué a considerar la posibilidad de decirle de una manera muy suave y delicada lo que estaba haciendo mal, servirle como una especie de maestra, qué se yo, enseñarle algunas cositas, pero después lo pensé mejor y decidí que no. No tengo vocación para la enseñanza y además me sentía molesta y estafada por el hecho de que que el fulano hubiera osado pretender tener una aventura conmigo (o con cualquiera, la verdad) contando con un equipaje tan escuálido.
A ver, no creo que debas actuar como maestra, no creo que lo necesite, pero si al menos indicarle lo que te gusta y lo que no. Por otra parte no estataria de mas indagar un poco en la vida sexual de tu amante antes de lanzarte a el, saber que le gusta, experiencas previas, etc… y de esta manera evitas,posibles fracasos y malas experiencias que te pueden hacer desistir en la busqueda de tu amante “ideal”.
Juan70,y eso como lo haces?? mientras te quitas la ropa con el corazón a mil….oye y a tí que te gusta?? que experiencias has tenido??? que te mide???….
Cada experiencia es única y cada persona también.
Las circunstancias no siempre te dan como para saber mucho de la vida sexual del otro.
Sólo hay que poner ganas y saber de las necesidades de la otra parte y por supuesto,de las tuyas .
Neofita,no te cortes.
Karicaturax, no tengo experiencia en estos temas,pero creo que si voy a buscar un amante, antes de lanzarme a sus brazos y poner mi corazón a mil, indagaría un poco. Tampoco se trata de que rellene un cuestionario con preguntas de todo tipo, pero si algo que nos indique por donde pueden ir los tiros, aunque ya sabemos que aquí no hay periodo de pruebas ni garantía jeje. Saludos.
Me gusto tu relato, pero me molesto tu comentario, por tener un “equipaje tan escuálido” no puede tener una aventura con usted, primero creo q yo con mi equipaje escuálido, seguro q puedo ser un amante quizás no insuperable y si complaciente, amable y dedicado a darle placer a mi pareja. Segundo es q según usted el macho latino o tiene 25 cm o on es macho, eso lleva a pensar en una deficiente información o formación, y evidentemente si no piensa comentar a su pareja q le gusta y que no ya empieza mal la relación, aún asi espero q encuentre el hombre q le lleve a la cima del placer…y haga un post después de este y que lo incluya,,,
Ay, no, por dios! Le aclaro: cuando digo un “equipaje escuálido” no sólo me estoy refiriendo a aquello con lo que nos dotó la naturaleza, ni mucho menos, sino sobre todo, al cúmulo de conocimientos, técnicas, incluyendo amplitud de mente, sensibilidad, etc., que a mi modo de ver debería manejar alguien que pretenda andar por allí dándosela de gran conquistador.
En cuanto a que si yo creo que el macho latino debe tener un pene de 25 cms, tampoco. Aqui tambien se aplica aquello de que ni calvo ni con 4 pelucas. Como dijo otra comentarista más abajo: “no es que tengan que ser enormes, pero sí necesitamos sentirlos dentro de nosotros”
Y en cuanto a comentarle a mi pareja lo que me gusta o no, creo que en el caso del sujeto con el “micropene” eso fue lo que me llevó a darle 3 oportunidades, con la esperanza de que a medida de que nos fueramos conociéndonos más pudieramos superar algunas dificultades del inicio, pero la experiencia me demostró que no se puede pretender enseñar nociones básicas de geometría a nadie si de entrada el alumno no sabe sumar, restar, multiplicar, etc…(Y ojo, es solo un ejemplo, no pretendo enseñarle nada a nadie!)
Hola amiga, desde luego me encanta tu relato, me gusta y coincido en cosas. Sobre todo en el punto 12 y en tu conclusión final. Tengo que decirte que yo he tenido mala suerte siempre en escoger parejas sexuales y eso ya lo expliqué en un relato anterior. Me solidarizo contigo y te deseo que seas feliz y encuentre lo que te agrada. Por cierto pero con tu marido sigues?
Vive el momento presente, recibe lo que viene. Si te conviene bien y si no es el caso, ya vendrá algo mejor. No es porque las primeras experiencias no fueron buenas que estás en una ley de serie. Lo bueno está por venir! Vive tu vida plenamente y como mejor te conviene.
No creo que seas exigente, tu trayectoria me recuerda un poco a mi, yo sí que pasé por un divorcio y luego también he tenido experiencias que no me han llenado, hasta encontrar la definitiva. Creo que la gran diferencia entre “insatisfactorias” experiencias y la “definitiva”, en mi caso, es en las ganas de dar placer de mi pareja. Él disfruta más dando que recibiendo, y aunque a mí también me pasa lo mismo, hemos conseguido llegar a complementarnos perfectamente. Yo reconozco que he tenido suerte y que he encontrado a mi medio pomelo, muy pronto…..seguro que tú también lo encuentras. Pero no puedo decirte cómo saber si va a resultar lo que necesitas, en una mirada, una conversación o un beso…esa es la pena,….de momento, vas experimentando y aprendiendo.
Sobre lo de recuperar a tu marido, que te comentaba “ojo vertical”, cómo tú lo veas, yo no conservé mi matrimonio por la misma razón, así que no creo que te merezca, pero eso es muy personal.
Gracias por escribir tan bien, ha sido placentero leerte. Un abrazo.
..Bueno: he aqui una mujer con una vida bien vivida … que sabe lo que quiere , pero por sobre todo LO QUE NO QUIERE!.. Deduzco que todo tiene una causa : la educacion recibida y la reaccion que tuvo para no permanecer como victima. Quiso ser ella misma aceptando nuevas experiencias. Buscando..( yo por eso no busco nada) una oportunidad apostando a que se puede!cambiar la historia – Tiene que ver ..voy sacando conclusiones,que todo a su tiempo nos va pasando ..Lo vivido y disfrutado en buenahora ….eso es parte de la auodependencia. espero no haber sido complicada en mi razonamiento. Besos!
Será un poco de todo? Visto lo narrado y sin conocer demasiados detalles, me pareces una mujer inteligente y con una preciosa redacción y exposición de los hechos. Sin duda has tenido poca suerte. Si buscas encuentras. ¿Quizás lo tengas en casa . Rehacer tu pareja y abrir el abanico de posibilidades? ¿Intercambio, swinger…? Es una idea. Desconozco las posibilidades reales de que tu pareja y tú podáis volver a intentarlo.
Gracias y felicidades por tu confesionario. Se te lee con placer!!
Hola. Me siento muy complacida de que le haya gustado mi relato. Soy de las que creen que ante situaciones así, sólo se pueden tomar 2 posiciones: te echas a llorar y armas un drama por la mala suerte que has tenido, blah, blah,… o te ríes de tí misma, le buscas el lado divertido al asunto y pasas la página, aún a sabiendas de que se te está cayendo a pedazos esa imagen romántica del amor perfecto: “la media naranja”, los “seres predestinados para estar juntos” y de que en realidad de lo que se trata es sólo de sexo, puro y simple sexo. Cuando logras diferenciar esas 2 cosas puedes verle el lado gracioso al asunto y darle su justa importancia. Y sí, también a la vista de las experiencias vividas he considerado rehacer el vínculo con mi esposo, aunque me temo que ya tomamos caminos demasiado diferentes y está muy dañado y que sólo sea cuestión de tiempo para que nos separemos definitivamente.
Me adhiero totalmente a tu comentario. Ojo vertical. Yo creo que esta mujer de 47 años ha elejido con un poco de premura. Cuando se deja algo que tenemos en casa hay que elegir muy bien.
Pero bueno…. sigue en ello mujer de 47 años, has hecho muy bien en dejar atras, en alejarte de personas que no han respondido a tus expectativas.
Ignoro como esta la situacion con su pareja pero no estaria mal la negociacion, la posibilidad de algun intercambio puntual podria aporotar algo nuevo (swinger) si pero habria eso si que estar muy de acuerdo con la pareja.
¡¡¡¡¡Animo mujer de 47 años. Y sonriele a la vida.!!!!!