El Confesionario LIV

1. Madre soltera de un niño de 10 años, desde hace tres tengo pareja estable, con la que, por cuestiones logísticas y laborales, convivimos sólo los fines de semana. Soy lesboflexible y sexocuriosa, si me tuviera que definir. En el amor soy monógama, en el sexo no. Solo me enamoro de mujeres. Mi alma es suya. Nunca lo será de un hombre.

2. Sin embargo, me gusta que me follen los tíos. A mis 48 años me habré acostado con unos 35 hombres y unas 25 mujeres. Ganan ellos. ¿Da qué pensar, no? Una, que va de lesbiana por la vida y resulta que se ha acostado con más señores que señoras. Pero para el amor las sigo prefiriendo a ellas, de eso no tengo ninguna duda.

3. Creo que “mi” sexo con ellos es como un acto mecánico, sin ningún tipo de atadura sentimental. Lo disfruto y punto. Y la mayoría entiende, a diferencia de muchas de ellas, lo que es un “aquí te pillo, aquí te mato” sin más, y yo no corro el peligro de enamorarme de un hombre.

4. Cuento con la gran ventaja de que mi sexo opuesto, salvo deshonrosas excepciones, es muy gentil y galante y en cuanto se enteran que soy lesbiana se esfuerzan y se trabajan mucho el “tema”. Les puede el poder ir corriendo a contarle a su amigote: “Oye tío, me acabo de follar a una lesbiana !y no veas como se lo ha pasado la tía!”

5. Durante siete años mantuve al mismo amante hombre (durante mi embarazo, in vitro, y primeros años de vida de mi hijo). Me sentía tranquila, cómoda y no me sacaba tiempo mental para la crianza de mi retoño. Nos veíamos una vez cada 15 días, venía a casa, follábamos, y luego se iba, sin más. Me sentía segura con él, no me podía enamorar, él estaba, está, felizmente casado, y sólo quería eso, sexo bueno y tranquilo, hablar un rato y tomar una copa.

6. Podíamos hablar de todo, sin complicaciones ni ataduras emocionales. Él, educadísimo, siempre esperaba a que yo tomara la iniciativa para ir a la cama, y nos dedicábamos a darnos placer, así, sin más. Si alguna vez, por lo que fuese, no terminábamos liados, él no se quejaba ni me lo pedía. Era como una norma no escrita. Ese era nuestro único compromiso: regalarnos un par de horas de buen sexo y que decidiera yo.

7. Hablábamos mucho de sexo, y me hablaba mucho de su mujer: una buena “esposa, compañera y madre”, pero poco “lanzada” sexualmente,  muy clásica, vamos.

8. Realizamos muchas de nuestras fantasías sexuales, como la de compartir cama con otra mujer, un trío, el sueño de muchos hombres y el de muchas lesbianas. Se fascinaba del poder sexual de las mujeres, de nuestra manera de actuar en la cama, de nuestros multiorgasmos y de cómo podíamos alargar el placer. Le encantaba mirarnos mientras nos corríamos y él se masturbaba, lentamente, con deleite.

9. Me gusta hablar con los hombres de lo que sienten al correrse penetrando a una mujer. Me encanta saber cómo se corre la gente y qué siente. Con las mujeres lo tengo más fácil, por serlo yo y por acostarme con ellas, pero con los hombres no.

10. Disfruto “picándolos” sobre el multiorgasmo, el orgasmo vaginal y el clitoriano, las múltiples variantes del placer femenino. No creo que nadie discuta sobre la complejidad de la sexualidad femenina en comparación con la masculina, al menos en general así es. Y me gusta que me expliquen con todo detalle sobre lo que yo creo que es el acto más sublime: sentir como una mujer se corre mientras la penetras. La mayoría de hombres lo sienten con el pene, también con la mano, claro está, pero a mí no me queda más que eso. La mano. Divina mano. Siempre les intento “picar” con ese tema con ellos: ver como se defienden hablando de la sensibilidad de su pene me enternece. Y entonces me los volvería a follar.

11. ¿Por qué me gusta que me follen los hombres? A veces (sólo lo he hecho con dos hombres) me gusta que me dominen, pero nunca una mujer. Si me tiene que dominar alguien que sea un señor. ¿Herencia secular del patriarcado? ¿Fantasía sexual no resuelta? Disfruté mucho en estas dos relaciones, que me tratasen como a una zorra, a una esclava. Tener que obedecer sin chistar, que me obligasen a chupársela y que me follaran sin previo aviso. Tengo varios consoladores, y buenos, pero me gusta que me folle un hombre, que me la meta, vamos. Eso nunca superará, para mí, el placer de un arnés con dildo.

12. Nunca les chupo la polla o los masturbo. Lo siento, señores, no puedo con ello. Sólo lo he hecho en las dos ocasiones que describo en el punto 11, y por imposición. Me da un asco terrible, me saben mal las pollas, puagg, lo siento, pero no puedo. Y si me cuesta tocar una polla, chuparla ya no te digo. Es superior a mis fuerzas. En cambio nunca me cansaría de lamer, chupar, succionar o besar un coño e intento atesorar en mi memoria los distintos sabores que encuentro, incluso intento averiguar el porqué de ese sabor, por alimentación, por etnia, etc. Pero con el semen no puedo.

13. Soy lesbiana, sí, pero me gusta follar con hombres, y reconozco, sin ningún rubor, cosa que a muchas de mis correligionarias les pone de les nervios, y me llegarían a expulsar del “club” si pudieran, que he aprendido mucho de sexo con ellos. Ahora soy feliz con mi pareja, y no me planteo engañarla con otra mujer, que para mí, y ella, sería el verdadero engaño. Estamos “negociando” hacer un trío con un hombre. Me encantaría ver como un tío se folla a mi novia. Sólo pensarlo me excita terriblemente. Ya os contaré…

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21 respuestas a “El Confesionario LIV”

  1. EstefaniaNacionalsocialista dice:

    En mi opinión es tonto,Entonces no eres lesbiana….Serias Bisexual aunque no quieras nada sentimental con un hombre…Las Lesbianas son solo entre mujeres y ya…Soy Bisexual y tengo novia aunque sólo me considero así porque me gustó un chico…me siento más lesbiana que Bisexual…Amo a mi novia ¿En serio un trío? ¿Hay gente que quiere ver como se cojen a su novia? Que idiotez

    sin ofender,Claro

  2. Ricard dice:

    Soy chico hetero y me encantan igual esos juguitos, siempre ha sido mi 1er impulso lamer el coño y perderme en él, con la lengua, la mano y también el rabo. Creo que la sexualidad femenina nos exige que actuemos como una compañera lesbiana en los prolegómenos y como un macho al final. es la única forma de saciar la sexualidad de una mujer, donde hay un gran componente de ternura. Tan solo echarles en cara que ellas no suelan responderme con “comerse” mis fluídos, aunque haberlas haylas,

  3. Miss A dice:

    Muy interesante lo que dice la chica, sobre todo me parece interesante como viven las lesbianas el tema del sexo oral, seguramente de forma mucho más natural que entre un hombre y una mujer.

    Sobre todo, después de leer el comentario de una chica que dice que le encantan los ‘juguitos de una chica’ y que no ‘desperdicia una gota’ jajaja Creo que por lo general los hombres ven más normal que una mujer disfrute de su semen que él de sus ‘juguitos’, no sé si habrá hombres por aquí que tengan que decir algo al respecto. Me consta que muchos hombres disfrutan dando sexo oral a una mujer pero tal vez éso de los ‘juguitos’ pueda ser algo incómodo para algunos.. No sé si serán mis sospechas por ser una mujer hetero.

  4. Mirian dice:

    La entiendo en lo de ser lesbiana y gustarle follar con chicos.
    Yo tambien soy una chica lesbi (mi record de chicas es muy superior,je,je,je), pero bajo determinadas circunstancias y ocasiones, me gusta follar con un chico.
    Me encanta hacer una felacion completa a un chico que poseea un gran instrumento.
    Me gusta tambien que un chico me haga sexo anal, pero solamente si encuentro esa rara avis que son los que realmente saben hacerlo. Casi podria distinguirlos hablando con ellos y, por supuesto ,que los detecto en los primeros compases en la cama.
    No obstante lo dicho, la proporcion de chicos sobre chicas, en mi rica vida sexual, es infima.
    No hay color, cuando entra en juego la ternura, complicidad, el tacto, el calor del cuerpo, el olor y el sabor. La naturaleza ha hecho perdedores a los chicos en esos parametros.
    Me vuelve loca el saborear los juguitos de una chica. No suelo desperdiciar ni una gota

  5. Una loca para cada loco dice:

    La moralidad va descrita desde lo que nos han enseñado desde niños y a pasado de generación en generación , blaaaa cada quien con lo suyo yo disfrutó el sexo a mi manera y me encanto la historia …. Los moralistas que hacen aquí?

  6. Anónima dice:

    “[…] él estaba, está, felizmente casado, y sólo quería eso, sexo bueno y tranquilo, hablar un rato y tomar una copa.”
    “[…] una buena “esposa, compañera y madre”, pero poco “lanzada” sexualmente, muy clásica, vamos.”

    ¿Alguien me puede explicar dónde veis que diga que la esposa no conocía y consentía su relación? Presuponéis lo que os da la gana y luego ponéis a parir a la autora por un prejuicio cuadriculado que está sólo en vuestras mentes. Aquí no especifica nada. Hasta que no se demuestre lo contrario, la película de la infidelidad y el engaño os la habeis montado vosotros solos. 😛

  7. Manu dice:

    Hay que ver lo fácil que es para algunos juzgar a esta chica,con tan sólo leer una confesión.¿como podemos atrevernos a hablar de moralidad?¿es que acaso la moral de cada un@ se puede imponer a los demás?.Respeto las opiniones de cada persona,pero a mi modo de ver,no es justo entrar a valorar cuestiones éticas o morales relacionadas con un asunto tan íntimo como la sexualidad de alguien,la cual,tan solo cuenta parte de sus experiencias.Que cada quien aplique su moralidad a si mismo o a su pareja y dejemos en paz a quienes tienen otra visión del sexo.
    Gracias por contarnos tu experiencia.

    1. m carmen dice:

      Muy cierto manuel!

  8. Jorl dice:

    Después de las palabras de Eriko, me doy cuenta de que debería pedir perdón. Esto es una página profesional sobre sexología y no un blog sensacionalista donde cualquiera puede arremeter con opiniones claramente ofensivas. ¡Pido disculpas!

    Si se me permite, quiero puntualizar en que POR SUPUESTO cada uno es libre de escoger su propia sexualidad. Pero, al igual que con cualquier disciplina, para un bien social común, siempre ha de haber un respeto. Creo que el ser humano es libre de elegir su forma de satisfacción sexual, pero en lo que quería puntualizar, es que anteponer las necesidades personales de cada uno por encima de la moralidad y el respeto humano, es un acto claramente egoísta. No creo que sea justificable dar rienda suelta a la sexualidad de cada uno cuando este acto puede causar dolor a otras personas. Si aquí presente hay alguien que quiere discutirlo, he de recordar que la violación es otra manera de satisfacer la sexualidad de un individuo, ignorando el dolor ajeno. Que la persona afectada no sea consciente de ello o que sea una tercera persona desconocida sea la víctima, no justifica el afán por satisfacer nuestros instintos básicos. En resumen: Ten una vida sexual sana, que hayas elegido tú y que respete la moralidad humana. Otra cosa sería un acto malvado y que no tiene cabida en el comportamiento humano.

  9. bally dice:

    Nunca e tenido sexo con mujeres pero no me desagradan pero leeo y entiendo a lo q se refiere creo q es libre de decidir y disfrutar si uno es casado es el problema d el no d ella, mas si entiende q es infidelidad ella no es infiel.
    estoy a favor d q disfrute y se pregunte porq tienen diferentes sabores algo q preguntar por cierto pero a mi por ejemplo tambien me gustan los penes y tener un sexo q disfrutar y q disfruten y eso es parte del ser humano todos tenemos pensamientos unos lo hacen otros no creo es mejor hacerlo y tener una opinion propia y no juzgar a nadie me gusto el articulo

  10. m carmen dice:

    Por lo que he leido y sacado en conclusion,los seres humanos no somos cuadriculados,al igual que nuestros pensamientos y vision del mundo es algo subjetivo, los comportamientos con respecto al sexo en este caso puede ser igualmente particulares,las personas van evolucionando ,si no estan condicionadas a moralidades e ideas.

  11. nina dice:

    Ella no tiene que darle explicaciones a nadie. De tener que hacerlo alguien, sería el casado… ¡y ni siquiera estoy segura de eso!

  12. Jorl dice:

    ¡Muy bien! Tirarte a tíos casados y sentirte orgullosa de ello, ¡bravo!. “Eh, no te metas con mi sexualidad.´´Su (curiosa, segun Ud. (bienvenida al siglo XXI)) vida sexual me importa más o menos lo mismo que la de los 300.000 habitantes que viven en mi ciudad. Es su conducta moral lo que me incomoda, ya que lo enfoca desde un punto de vista sexista, donde el hombre es una especie de polla simpática. Y Ud. dirá: “A las mujeres nos han tratado muchos años así.´´ ¡Cierto! Pero no creo que sea una justificación válida para acostarse con hombres casados y bloguearlo como una terapia sana. Más aun cuando hay personas que no han colaborado en absoluto en la histórica opresión de la mujer y no tienen la culpa de vuestra… promiscuidad. Muchas mujeres te verán como una inspiración. Sí. Desde luego. ¿Pero y si un día fueran ellas la novia del tío que te follas? ¡Mmm! ¿Serian tan simpáticas contigo? ¿Te apoyarían tanto? ¿Te darían todos esos mensajes de ánimo? Más bien yo creo que una y cada una de ellas te llamaría lo que estoy pensando de ti ahora mismo. ¿Eso es lo que le vas a enseñar a tu hijo?: “Tú cuando te comprometas, no te preocupes, hijo, tú podrás seguir follándote a quien quieras.´´ Me parece Ud. una egoísta, una rompehogares, una irresponsable y una presona del todo inapropiada para criar y/o educar a un futuro miembro de la sociedad. Deseo enormemente que sea victima de su enmascarada reindivicación.

    1. Eriko Madora dice:

      Uuufff vaya descarga!!!, me atrevo a comentar porque aunque soy fiel lector de Las Confesiones me habia propuesto no inmiscuirme en las discusiones ya que opino que la vida sexual de una persona es asunto privado y personal de cada quien, en mi opinion nadie es dueño de nadie y podemos acostarnos con quien nos plazca cuando nos plazca, al final nuestro cuerpo solo es “carne”. Pero, siempre hay un pero, el problema viene cuando existe la doble moral y por un lado las personas quieren aparentar llevar una vida modelo de buenas costumbres y alta etiqueta delante de sus familiares y amigos pero cuando cierran la puerta se entregan desmesuradamente al primer placer carnal que este disponible sin importarle las repercusiones familiares, sociales y morales que esto pueda tener en su vida. Opino que una persona debe sincerarse con su condición sexual y dejar de aparentar lo que no es delante de otras personas , sobre todo si esa otra persona puede resultar lastimada por el comportamiento promiscuo de su pareja. Es en este punto donde el (la) “señor(a)” esposo(a) de aquella buena persona y entregado(a) a su hogar y padre (madre) de esos lindos hijos perfectos deberia preguntarse si esta bien (no solo para el (ella), sino tambien para su familia) que se acueste con cuanto personaje le pasa por delante simplemente porque su cuerpo se lo pide, no seria preferible dejar de jugar a lo seguro en esa doble partida injusta en donde solo uno de los dos gana y decidirse de una vez por todas a dar la cara y decirle a su pareja: “mi amor hasta aqui llegamos, te amo pero no me satisfaces sexualmente, yo quiero mas, y no quiero hacerte daño, por lo que necesito separame de ti y hacer con mi vida lo que me plazca sin tener que andar escondiendome, espero sepas entenderme”. No es facil verdad, definitivamente hace falta mas valor para hacer esto que para andar siendo promiscuo a escondidas, asi que esos promiscuos que engañan a escondidas y se creen muy valientes y aventajados por hacerlo en realidad solo son unos cobardes autojustificados.

      1. Jorl dice:

        Eriko:
        No puedo estar más de acuerdo contigo. No sólo lo has expuesto desde un punto de vista imparcial, si no que has respetado también la opinión de las distintas facciones que se hayan podido generar al exponer este caso. Aplaudo tu profesionalidad y admito que he recibido una lección de humildad. ¡Gracias!

    2. dddd dice:

      “Me parece Ud. una egoísta, una rompehogares, una irresponsable y una presona del todo inapropiada para criar y/o educar a un futuro miembro de la sociedad. Deseo enormemente que sea victima de su enmascarada reindivicación.”
      Ejem….el que está casado es el señor en cuestión. Ojo, que no me parece bien lo que hace la protagonista, pero peor lo hace el otro. Lo que veo es cierto tinte machista: parece q los hombres son siempre menos culpables que las muejres. Nunca se habla del amante de una mujer casada como un destrozahogares. Si el hombre es adultero, la mayor parte de la atención o la cupla se desvía hacia la amante: es una zorra, una robamaridos…..es como si la responsabilidad del hombre adultero quedase en segundo plano, como si el pobrecito hubiera sido hechizado sin remedio por esa arpía sin entrañas.
      si es la mujer la que tiene un amante, el amante jamás es tan mal catalogado como ella. Ella es una zorra, adúltera y el amante, simplemente es un hombre que ha aprovechado la oportunidad que se le presentaba.
      Es comosi las mujeres tuvieramos la respnsabilidad de nuestra propia conducta sexual (lógicoy normal) y también de la de los hombres.

  13. Mary dice:

    Me a encantado, uuuuaaaauuuuuuu!!!!!!ojala q valla despertando la gente y no sean tan tradicionales y aburridos ….

  14. carlos dice:

    Y qué hay del sexo anal pues? Eres partidaria? Quiero decir, hablas de diferentes fantasías cumplidas a través de los hombres, pero qué hay de esto?

    Gracias por esta increíble y genial confesión.

  15. Hugo dice:

    “Disfruto “picándolos” sobre el multiorgasmo, el orgasmo vaginal y el clitoriano, las múltiples variantes del placer femenino. No creo que nadie discuta sobre la complejidad de la sexualidad femenina en comparación con la masculina, al menos en general así es. ”

    Bueno, los hombres también tenemos la próstata, sí, incluso los heterosexuales podemos disfrutar de un buen masaje de próstata y de sus orgasmos intensos.

  16. Louis Cypher dice:

    Me encanta descubrir mujeres que se expresan con tal naturalidad.
    Vaya suerte va a tener el colega con el que vayan a hacer el trío. Mi fantasía sexual por antonomasia.

    Besos y suerte.

  17. Endorfina dice:

    Claro que sí, una tía con las ideas claras. Me ha encantado, sabes lo que quieres y así lo expresas, no me quiero ni imaginar lo que habrás tenido que escuchar a tu alrededor. Este confesionario va a derribar muchas ideas preconcebidas que tenemos, porque mira que a veces somos cuadriculados. Y también creo que es un lujo encontrarse con alguien con esa actitud y si es tu compañera de cama, mejor. Ojalá que disfrutes durante toda tu vida y que el resto tengamos la fortuna de cruzarnos con más gente así como tú.

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